El 30 de abril de 2003, se publicó uno de los Elseworlds más llamativos de la historia de DC: Superman Hijo Rojo, que se puede conseguir actualmente en Argentina de la mano de la Editorial Ovni Press. Mark Millar, escritor escocés que poco tiempo atrás había logrado reconocimiento, exploró una idea curiosa: “¿Qué pasaría si Superman hubiera caído en la Unión Soviética (URSS) en vez de en Kansas?”.
A 19 años de su salida, Nota al Pie hace un análisis de una de las historias más icónicas de Superman.
¿Qué es un Elseworld?
La traducción literal del término es “otro mundo”. El concepto es, en esencia, un cambio parcial en la historia original para explorar alternativas. En los Elseworlds, los personajes buscan mantener su esencia en mundos y tiempos completamente diferentes al canon de sus historias. El término se acuñó con Batman Luz de Gas de 1990, que enfrentó al “Cruzado de la Capa” con Jack el Destripador.
Actualmente, por la serie de Disney+, What If, el público no lector está más familiarizado con la versión de Marvel de los Elseworlds. DC tardaría un tiempo en crear su versión de estas historias alternativas, pero cumplen la misma función.
Camarada Superman
En Superman Hijo Rojo, el alienígena cae en una granja de Ucrania para ser criado por dos granjeros. Con el tiempo, comenzó a descubrir sus habilidades que nacen por la absorción de radiación que le brinda el sol amarillo de nuestro mundo. Al ser criado dentro de la Unión Soviética, decide dedicarse a usar sus habilidades en apoyo al partido de Joseph Stalin.
En Estados Unidos (EEUU), la joven periodista Lois Luthor recibe un llamado que pondrá sobre aviso a toda la Nación. Su marido Lex, una de las mejores mentes del mundo, tomará la noticia a la ligera, pero luego lo hará personal. De esta forma, la Guerra Fría se acabará mucho antes de lo que se buscaba, gracias a este ser súper poderoso. Pero esto es solo el principio de un gran enfrentamiento.
«Superman Hijo Rojo»: una fábula en negativo
La intención de Millar en Superman Hijo Rojo era colocar al primer superhéroe en una posición absolutamente opuesta a la que tuvo como concepción. Desde su creación, Clark Kent luchó por “la verdad, la justicia y el estilo de vida americano”.
Sin embargo, esta frase es algo confusa. La realidad es que el “estilo de vida americano” no refiere a cómo se vive en EEUU, si no al ideal de lo que elles quieren representar: “la tierra de la paz y de las oportunidades”.
En la película X-Men (2000), Magneto (Sir Ian McKellen) hace referencia a este ideal. Cuando Rogue (Ana Paquin) le pregunta por qué hace lo que hace, este responde: “Porque no existe la tierra de las oportunidades, no hay paz”. Entonces, ¿por qué lucha Superman?
Esto es lo que buscaba explicar Millar. Ya sea que Kal-L caiga en Ucrania como en Kansas, ya que Superman no es definido por una bandera. A lo largo del relato, el escocés nos muestra cómo es que este personaje busca constantemente hacer lo justo y lo correcto. La esencia del superhombre no es defender un territorio, sino al ser humano.
Contexto político-social
Nacido en Coatbridge (Escocia) en 1969, Millar creció con la visión europea occidental de la Guerra Fría. Para Occidente, lo que sucedía en la URSS era sinónimo de aplastar la libertad del hombre, pero como también lucharon contra los nazis, había una reticencia. Por esto, ese enfrentamiento se dio en silencio.
La formación de Millar sirve para dar base a lo que sería la educación de Superman, y cómo se retrata la URSS de Stalin. Esto da pie a los conflictos que el alienígena deberá enfrentar cuando, al morir el jefe de Estado, el partido y la unión entren en crisis. Esto llevará al primer gran problema: Batman.
En esta historia, el murciélago es un niño cuyos padres fueron asesinados por ser disidentes del partido comunista. Pese a sus creencias de justicia, al tomar el poder, Superman mantiene cerca suyo al asesino de los padres de Batman. Esto hace que el ahora revolucionario lo tome personal. Wonder Woman tendrá también un rol a destacar como política.
El motivo por el que Superman toma las decisiones que elige, es por el ideal de justicia con el que fue educado.
Una Guerra Fría diferente en «Superman Hijo Rojo»
Agotando el recurso de Batman, el enemigo más grande de Superman en Superman Hijo Rojo será Lex Luthor, quien dista de ser una figura del bien, aunque represente a Estados Unidos. Al ser ambos poseedores de una dotada inteligencia, el norteamericano y el soviético se trenzarán en una guerra de intelectos que durará décadas. El hombre de Moscú lo hará porque considera que debe traer paz; y el americano, por celos.
El clímax del enfrentamiento llevará a una revelación que terminará por unir a ambos contrincantes para salvar al mundo. Superman, finalmente decidirá hacerse a un lado y permitir que los hombres lleven el mundo cómo más les convenga, sin interferir. Acepta que su educación no era un camino único y absoluto, y que su totalitarismo es un camino errado.
Una conclusión insuperable
Mark Millar concluye su historia con un epílogo que celebra al ser humano de forma hermosa. Une el concepto de Superman al de la especie humana, y permite que el lector pueda hacer una reflexión muy profunda. Este alien existe por un motivo concreto, y nosotros somos representados tanto por él como por Luthor.
La perspectiva que genera el autor con su reflexión es la pieza fundamental por lo que esta historia es concebida en primera instancia. Lejos de las banderas; de las ideologías; del cómo nos afectamos a nosotros mismos. La capacidad de reconocer el bien y el mal nos convierte en quienes somos. Somos la sociedad en la que vivimos, pero eso no nos limita.
A Millar lo acompañan los artistas Dave Johnson, Andrew Robinson, Kilian Plunkett y Walden Wong. Estos dibujantes definen el humor y la estética que, si bien no busca el realismo, permite la inmersión en la historia.