La Organización Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá) llevó a cabo un informe donde revela un registro de 103 femicidios y trans-travesticidios ocurridos entre el 1 de enero y el 30 de marzo de 2022. La documentación constató que estos crímenes ocurren en todo el país cada 22 horas.
El nuevo registro dio a conocer un total de 66 femicidios (femicidios vinculados y trans-travesticidios). También se registraron 10 muertes violentas de mujeres que se encuentran en proceso de investigación. Otras 23 fueron por violencia asociada al género, vinculadas a economías delictivas o colaterales. Finalmente, ocurrieron 4 suicidios femicidas y se registraron 100 intentos de femicidios
70 niñes y adolescentes perdieron a sus madres por esta causa; mientras que la edad promedio de las víctimas es de 39 años. Asimismo, el informe de Mumalá señala: que el 70 % de los femicidios fueron cometidos en la vivienda de la víctima o en la vivienda compartida; que el 67 % de los femicidios fue cometido por parejas o exparejas; que el 47 % de las mujeres fueron asesinadas con arma blanca, y que el 18 % de mujeres víctimas de femicidios había denunciado a su agresor previamente.
Dentro de las mujeres que contaban con una denuncia, el 64% tenía orden de restricción de contacto o perimetral y el 14 % además botón antipánico. Sumándole a eso, el 9% de los femicidios fueron cometidos por personas de las fuerzas de seguridad.
Nota al Pie diálogo con la vocera nacional de la Organización Mujeres de la Matria Latinoamericana Victoria Aguirre, quien resaltó la realidad de los femicidios, trans-travesticidios en el país.
¿Cómo calcula Mumalá las tasas de femicidios?
Las tasas de los femicidios se calculan en base a la población estimada al 2022 por el INDEC (Instituto Nacional de Estadística y Censos), según proyecciones basadas en el Censo de 2010. Este año tendremos un nuevo Censo que nos va a permitir establecer una tasa basada en datos concretos.
¿Qué pasa con las mujeres que sufren un intento de femicidio?
Esta es la gran deuda del Estado. Estás mujeres y disidencias, en su gran mayoría, quedan sin resguardo y sin posibilidades de exigir justicia. Los programas no se están implementando, ni el acompañar, ni ninguno que se haya pensado para estos fines.
La situación es muy grave. Hablamos de personas que quedan vulneradas y en algunos casos con riesgo de vida constante mientras su agresor sigue libre. Porque no existe querella gratuita, y el patrocinio jurídico gratuito es prácticamente inexistente.
¿Qué pasa con les niñes que quedan sin madre?
Este es otro gran problema. La Ley Brisa también es muy burocrática y poco accesible; a parte que, lo que se “otorga” en el caso que se logra, es un cobro de un Salario Mínimo, Vital y Móvil, que sabemos que no alcanza. Pero lo más preocupante es que no hay un acompañamiento de la situación. Lo mismo sucede con la implementación del Acompañar.
¿Por qué La Pampa y Santiago del Estero presentan la mayor tasa de femicidios?
Tiene que ver directamente con la población femenina y los casos de femicidios registrados. Es una fórmula matemática. Pero, si tenemos que hablar de cantidad de femicidios, sigue siendo la Provincia de Buenos Aires la que más femicidios reporta por mes.
¿Mumalá ha podido comunicarse con el Estado para exigir la Emergencia Ni Una Menos?
Lo hemos hecho de manera formal en dos oportunidades: al asumir este Gobierno y al momento de la creación del Ministerio. No hemos logrado articular políticas en conjunto. Siguen queriendo tapar el sol con un dedo. No quieren mostrar los datos que nos duelen y que son los que reportamos todos los meses.
Ocurre una muerte violenta de mujer o feminidad disidente cada 21 horas en Argentina. Seguimos sin tener datos oficiales. No hay una intención política de terminar con la violencia de género. En un país donde el 9% de los femicidas pertenece a las fuerzas de seguridad, es imperioso que se tomen medidas urgentes para terminar con esto.
¿Que pasará si no reciben respuesta ni soluciones?
Lamentablemente, como lo venimos denunciando, la deuda es con nosotras y con nosotres. Seguiremos visibilizando lo que nos pasa: lo que nos da miedo; lo que nos sucede diariamente; seguiremos exigiendo presupuesto, protocolos y políticas públicas conducentes a erradicar la violencia.
No queremos seguir contando femicidios evitables. El 18% de las víctimas de femicidios tenían denuncias previas. Estas fueron violencias que el Estado no tomó en serio. No queremos ser parte de esta estadística.Hay países que han logrado revertir esta situación con los dispositivos duales. Vamos a seguir en las calles, exigiendo al Estado que no elimine la única herramienta que hoy está a disposición, que es el Potenciar Trabajo para víctimas de violencia; que incluso tiene una demora de más de 8 meses. Estas son situaciones graves.