Este lunes la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) se reunió con Amnistía Internacional (AI) en Zúrich, en donde se analizó la situación de les trabajadores migrantes en Qatar. El debate se centró principalmente en las condiciones de les empleades del sector de los servicios, principalmente quienes se vinculan a la hotelería.
Mejorar las condiciones laborales
Cada vez falta menos para que la pelota ruede en Qatar y se de comienzo al próximo mundial. Las construcciones de los estadios disminuyen gradualmente. Es por esto que el punto central del debate fue la situación de les trabajadores del sector de los servicios, en particular del sector de la hostelería.
A su vez, informaron que se llevará a cabo una inspección para este sector y que las empresas deberán implementar las medidas impuestas por la FIFA. Todo esto es “parte del compromiso continuo de la FIFA con las organizaciones laborales y de derechos humanos antes de la Copa Mundial de la FIFA Qatar 2022«.
Protección de trabajadores
En relación a esto, y previo a la reunión con AI, Joyce Cook, directora de responsabilidad social y educación de la FIFA, comentó: “Seguimos totalmente comprometidos a garantizar la protección de los trabajadores que participan en la entrega de la Copa del Mundo’’. Agregó: ‘’Estamos seguros de que el torneo también servirá como catalizador para un cambio positivo y duradero más amplio en todo el país anfitrión”.
Desde la FIFA, hacen hincapié en que la organización del mundial en Qatar dio lugar a “mejorar las condiciones laborales en la región’’. Y sostienen que el país ‘’está en el camino correcto al introducir reformas laborales radicales y lograr avances sustanciales, en lo que ha sido un período comparativamente período de tiempo muy corto’’.
Por su parte, instituciones como la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Confederación Sindical Internacional (CSI), entre otras, reconocen y avalan que la Copa del Mundo ha contribuido significativamente a mejorar las condiciones laborales en Qatar. Esto a partir de normas más estrictas establecidas por organizadores locales del torneo y cambios legislativos más amplios en el ámbito de los derechos de trabajadores.
El legado de la Copa del Mundo
Luego de recibir a representantes de Amnistía Internacional, Gianni Infantino, presidente de la FIFA, se reunió este martes con el Dr. Ali bin Samikh Al Marri, Ministro de Trabajo de Qatar, en Doha. La charla se centró en los avances que se dieron en la última década en relación al “bienestar de los trabajadores y los derechos laborales”.
El máximo mandatario del ente regulador del fútbol mundial comentó: «Me complace ver el fuerte compromiso de las autoridades de Qatar para garantizar que las reformas se implementen por completo en todo el mercado laboral, dejando un legado duradero de la Copa Mundial de la FIFA mucho después del evento y beneficiando a los trabajadores migrantes en el país anfitrión a largo plazo».
Por su lado, Al Marri declaró: «El Estado de Qatar ha sido pionero en la modernización de las leyes y regulaciones laborales relacionadas con el bienestar de los trabajadores. Dichas reformas se basan en un marco legal y legislativo que seguirá aplicándose después de la Copa del Mundo».
Al mismo tiempo, la FIFA señaló que la nueva ley de salario mínimo ya ha permitido un aumento de salario para 280.000 trabajadores, lo que corresponde al 13 % de la fuerza laboral total. Del mismo modo, desde mayo de 2021, la legislación sobre el trabajo a altas temperaturas (con la prohibición del trabajo al aire libre por encima de los 32,1 °C en el índice WBGT) ha dado lugar a una fuerte disminución de los casos relacionados con el calor tratados en Qatar. 338 empresas cerraron, producto del incumplimiento desde su aplicación.
Derechos que no se ven
A pesar de esta ampliación de derechos que remarca la FIFA, el ente organizador es criticado por haber elegido como sede a un país que no tiene historia futbolera y que está plagado de denuncias por violacion a los Derechos Humanos y explotación laboral.
En su momento, AI realizó un informe en donde compartió las ocho formas de explotación que sufren una considerable cantidad de trabajadores de las obras del estadio Jalifa y la “Aspire Zone”. En la nota cuentan que muchas personas migrantes procedentes de Bangladesh, India y Nepal acuden a Qatar para trabajar. Allí, no tienen la posibilidad de salir del país o cambiar de trabajo, con el agravante de que tienen que esperar meses para cobrar.
Desde que iniciaron las construcciones de los estadios en el país árabe se registraron más de 6.500 muertes por las extremas condiciones de trabajo. “Mi vida aquí es cómo estar en una cárcel. Un gerente de una empresa dijo: ‘’Si quiere quedarse en Qatar, cierra la boca y sigue trabajando”, contó en su momento Deepak, obrero metalúrgico de las obras del estadio Jalifa, al organismo internacional.
Por último, Amnistía Internacional compara las cifras que mueven las empresas constructoras y el dinero que ingresa con el sueldo de les empleados de las obras de los estadios. Además refleja todas las adversidades que tuvieron que atravesar día tras día y cómo sus derechos no fueron ni son respetados.