La película “Yo nena, yo princesa” llegó al cine en octubre pasado, con un elenco protagonizado por Eleonora Wexler y Juan Palomino, y con la producción de Federico Palazzo. A su vez, fue coproducida por Grupo Octubre, la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM), Arco Libre & Aleph Media, Tronera y HSVG Producciones.
Este año, la obra fue elegida desde la Entidad de Gestión de los Derechos Audiovisuales (EGEDA) y la Federación Iberoamericana de Productores Cinematográficos y Audiovisuales (FIPCA), junto con las Academias e Institutos de Cine.
Las categorías por las que fue seleccionada fueron las siguientes: Mejor Película Iberoamericana de Ficción; Premio Platino al Cine y Educación en Valores; Mejor dirección y mejor guión a Federico Palazzo; Mejor interpretación masculina a Juan Palomino y femenina a Eleonora Wexler; y Mejor interpretación femenina de reparto.
Sobre el film
La película está basada en el libro “Yo nena, yo princesa”, escrito por Gabriela Mansilla, madre de Luana, la primera niña trans que obtuvo su DNI en la Argentina sin necesidad de un dictamen médico ni judicial.
Luana y su mamá comenzaron su camino de lucha en 2013, y significó un hito ya que el Estado por primera vez reconoció la identidad de género asumida por la niña; y luego, se impulsó la creación de la Asociación Civil Infancias Libres.
Durante el desarrollo de la película, la madre visita médicos y psicólogos que no logran encontrar la causa de las actitudes de su hija. Luana y su madre luchan no sólo por su DNI, sino también contra los prejuicios y discriminaciones instauradas en la sociedad.
En la misma línea, el film invita a una reflexión con el fin de generar conciencia y concebir la identidad como derecho humano fundamental, que debe ser accesible a todes les niñes.
Gabriela Mansilla, la escritora del libro y madre de la protagonista, busca que el recorrido de Luana concientice a la sociedad sobre las identidades trans, con el fin de eliminar de una vez por todas su exclusión.
“Este libro es, sin lugar a dudas, una historia de reflexión profunda sobre los prejuicios y los saberes instituidos, tan cercanos muchas veces a la ignorancia. Yo nena, yo princesa es una declaración en la que el desafío, la perseverancia y una fuerte lucha por la identidad se enfrentan a los problemas de lo cotidiano, de los vínculos sociales y de nuestra relación con las instituciones”, explicó Gabriela en una conferencia de prensa.
¿Cómo continúa la lucha por los derechos?
La mamá de Luana es fundadora de la Asociación Civil Infancias Libres, que preside en la actualidad. Esta organización trabaja por la visibilización y los derechos de niñes y adolescentes travestis y trans.
Además, su impulsora se define como militante por elles, por lo que es la voz de este colectivo; y está dispuesta a todo para que la sociedad y el Estado reconozcan la lucha por los derechos de su pequeña hija Luana.
También, desde la Asociación Civil Infancias Libres realizó un extenso trabajo de archivo y documentación sobre información de les niñes y su autopercepción, para presentar en la Legislatura bonaerense.
En sus estudios, luego de realizar numerosas entrevistas a padres de niñes, determinó que solo el 6 por ciento de las familias tuvo como primera reacción la aceptación del sentir de sus hijes, sin vincularlo con un malestar o padecer.
Luana es la niña que eligió su propio nombre y rompió con los estereotipos de género. Sin dudas, inauguró la lucha para que se acepte su identidad, dejar de ser Manuel para ser Luana.