El presidente del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, informó a Télam, este jueves, que Ucrania y Rusia están en condiciones de trabajar en coordinación con la organización para garantizar la seguridad de las instalaciones nucleares comprometidas por la guerra.
A sí mismo, Grossi informó a periodistas de Viena que “las dos partes están dispuestas a trabajar y discutir con el OIEA”. Este anuncio se dio este jueves, tras reunirse por separado en Antalya, Turquía, con los cancilleres ucraniano, Dmitri Kuleba, y ruso, Serguei Lavrov.
La agencia de noticias AFP aseguró que Grossi dijo que las reuniones con los cancilleres de las dos partes en guerra fueron “fructíferas, pero no fáciles”.
“Los encuentros de Grossi con Kuleba y Lavrov ocurrieron después de que Ucrania informara al OIEA que perdió la comunicación con la central nuclear de Chernóbil”, explicó Télam. La central nuclear está ocupada por tropas rusas desde los primeros días de la invasión.
Centrales nucleares e invasión rusa
Grossi advirtió que la situación sobre la central nuclear “era terrible, con incidentes cada vez más frecuentes”. Por eso, se necesitaba de carácter urgente “un marco común para reforzar la seguridad de las instalaciones nucleares”, aseguró Télam.
Por otra parte, el portal dw.com informó que “el director general de la OIEA lanzó el grito de alarma ante las condiciones que se degradan para los 200 técnicos y guardias bloqueados en el lugar desde hace dos semanas”.
Zaporiyia, la central más grande de Europa, también está ocupada por el ejército ruso. “Fue blanco de disparos de artillería el 4 de marzo que causaron un incendio e hicieron temer una catástrofe”, informaron los portales antes mencionados.
Y por otra parte, el Organismo agregó: “Actualmente, no es posible entregar las piezas de recambio necesarias y para el personal especializado proceder a las reparaciones previstas». En la víspera alertó de la «repentina interrupción de las transmisiones de datos desde esa planta».
Funcionamiento y regulación
En cuanto a la situación en Chernóbil, la agencia emitió un comunicado y señaló: “Es probable que la falta de electricidad provoque un mayor deterioro de la seguridad radiológica operativa en el emplazamiento”.
El director general explicó que, a pesar de que los datos pueden ser guardados localmente, “la capacidad de almacenamiento, así como el estado operativo de los sistemas de vigilancia, siguen siendo inciertos”.
El regulador nuclear de Ucrania informó al OIEA, que “ocho de los 15 reactores del país siguen funcionando, incluidos dos de los seis de Zaporiyia, con niveles de radiación normales”.