Frente a la grave situación que atraviesa Corrientes tras los incendios y la sequía, la provincia se encuentra inmersa en una emergencia agropecuaria. Representantes de la Federación de Organizaciones Nucleadas en la Agricultura Familiar (FONAF), la cual agrupa 50 organizaciones campesinas de la región, se reunieron este miércoles en la Agencia del INTA para discutir los mecanismos de ayuda por parte del Gobierno de la provincia.
El gremio planteó su principal preocupación por el mecanismo de distribución de incendios y sequías que se está implementando. Además, denuncian que a pesar del anuncio que realizó el Gobierno sobre la entrega directa de subsidios, créditos y ayuda en el alimento para el ganado y acceso al agua, les pequeños productores no ven claridad en la política de ayuda.
En la reunión se hicieron presentes casi todos los organismos invitados: el Instituto de Desarrollo Rural (IDERCOR) yel Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA). Además formaron parte el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y la Secretaría de Agricultura Familiar.
Preocupaciones sobre el caso
La FONAF expresó que les preocupa cómo circula la información y la implementación de las ayudas entre la Provincia y Nación. “A nosotros nos preocupa estar presentes para tratar que esas ayudas que vienen con ese carácter solidario tan importante es que realmente llegue a los sectores que realmente necesitan”, manifestó Carlos Roggero. Actualmente forma parte de la Delegación Provincial de la FONAF Corrientes, en un informe de FARCO (Foro Argentino de Radios Comunitarias).
Además, Roggero se expresó sobre la grave situación que atraviesan.“Las circunstancias de sequía, este fenómeno climático,sumado al incendio por las condiciones que se dieron en Corrientes en particular, las entendemos”, comprendiendo los efectos dañinos que viene padeciendo la provincia.
Sin embargó remarcó que “no tenemos que perder de vista la política agropecuaria que vamos a desarrollar a futuro o que deberíamos venir teniendo antes. Hoy el panorama está agravado, la deficiencia de agua no es de ahora, es de tiempo atrás”.
El gremio viene discutiendo respecto a esta situación hace un tiempo, la semana pasada emitió un comunicado: “Manifestando nuestro pesar por la grave situación que atraviesa el sector rural de nuestra provincia, nos preocupa que nuestro sector esté quedando rezagado de las ayudas del Estado”.
También denunciaron que “nuestro sector viene siendo castigado desde hace mucho tiempo por falta de políticas agropecuarias, luego por la pandemia, la sequía histórica y ahora por los incendios, que afectaron seriamente nuestra producción”.
Propuestas y soluciones
En este marco de preocupación, la FONAF propuso como respuesta a la situación que atraviesan cerca de 10 mil pequeños productores la conformación de una mesa provincial en la que participen todas las organizaciones campesinas. Además, esperan incluir a las instituciones que trabajan con el sector. De este modo, esperan avanzar en la planificación, conformación e implementación de políticas públicas en el corto, mediano y largo plazo.
Al respecto, Roggero expresó que “la FONAF dio un paso importante porque nos encontramos las instituciones presentes. Aunque faltó el Ministerio de Producción y la gente del Senasa (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) interpretamos que hubo una buena aceptación de la propuesta que llevamos”.
El delegado desarrolló que la propuesta se basa en “articular las gestiones para que lleguen los resultados de forma práctica y rápida al pequeño productor”. También agregó que estas políticas agropecuarias «para el sector de los pequeños productores se circunscriben en todos los ámbitos: hortícola, citrícola, ganadero, las actividades apícolas y las distintas actividades que atañen al sector productivo”.