Luego de dos años suspendido por la pandemia, el mega evento Cosquín Rock fue celebrado este sábado 12 y domingo 13 de febrero. La edición 2022 fue de suma diversidad y vanguardia artística. Se llevó a cabo en nueve escenarios y una surtida agenda de 154 espectáculos musicales. El área de Investigación y Extensión del Instituto Cultura Contemporánea de Córdoba Capital realizó una investigación sobre la enorme convocatoria, nada menos que 85 mil personas reunidas en el Aeródromo Santa María de Punilla. El mismo dio como resultado impactantes cifras y porcentajes.
Este año, las sierras cordobesas fueron sacudidas por un abanico de artistas de variados géneros y generaciones. Algunos de los que se presentaron fueron Julieta Venegas, Maria Becerra, Los Auténticos Decadentes, Fito Páez, Divididos, Ciro y Los Persas, Babasónicos, Wos, Guasones, Él Mató a un Policía Motorizado, Las Pelotas, Skay y Los Fakires, Eruca Sativa, Turf, Airbag, Los Espíritus, y Bándalos Chinos. Con un cierre especial con la presencia por primera vez del inigualable showman, la Mona Jiménez, junto a él estuvieron Juanse y Micky Rodríguez.
El impacto económico y las cifras
Durante el sábado y domingo, el estudio realizado sobre los asistentes arrojó datos socioculturales y económicos. Además, consideró el género y el impacto sobre el medio ambiente. Una investigación diseñada al detalle por Mariana González, magíster coligada de Estadística e investigadora de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba. Fue llevada a cabo por un conjunto de especialistas, junto a quince pasantes. Un informe comandado por Lucas Miani y el reporte fue concebido por Rodrigo Rojas.
Los datos jugosos que dejó el evento
En consumo cultural, el festival reclutó medios por 1.415 millones de pesos. Entre la inversión para organizarlo, más los gastos del público, entre ellos: el alojamiento, el transporte y las comidas.
Según el estudio sobre las entradas compradas en internet arrojó que los visitantes de Buenos Aires obtuvieron el 39% de dicha manera. Y los que las compraron en el predio, un 55% proceden de otras provincias. Un 47 % se alojaron dos noches en la zona y otro 27 % por tres. Otro 36,6 % optaron por cabañas, donde el costo promedio es de 5.000 pesos la estadía.
Estos concurrentes conforman un nicho etario muy variado. Más del 40% dijo ser estudiantes de universidad, el 30 % trabaja y estudia. En materia familiar, más del 70 % no tiene hijos. De los cuales para un 59,7 % fue su primera vez en asistir al festival, de los cuales un 50,7 % usó abonos. Lo que representa, de seguro, una suba importante de inversión turística.
La identidad de género y la salud
Un dato interesante es que un 85 % de los asistentes declaró que la identidad de género de los cantantes no incidía en la elección de sus gustos por las bandas sobre el escenario. Y que en un 70 % iban a vivir la experiencia de un festival, donde solo un 30 % tenía en cuenta la agrupación que tocaba en escena. Es más, un 68 % se vio abierto a conocer nuevos artistas en estos festivales.
Con respecto a la sustentabilidad, más de un 80 % respetó la política que llevó adelante la organización del festival. Un 60 % dijo haber tomado medidas propias para manejar sus residuos. Con respecto a la salud, un 25 % de los presentes tomó recaudos frente al COVID durante los shows. Fueron suministrados 60.000 litros de agua gratis por la administración para consumir por la enorme masa de asistentes.
Para armar dicho festival, se necesitaron 5.630 empleados directos. Pero si se tiene en cuenta los agentes indirectos, como también los emprendedores e independientes, la suma asciende a 10.000 personas involucradas en la realización del mismo.