Las organizaciones y asambleas en defensa de los humedales se preparan para un nuevo año de lucha, luego de que el proyecto de ley quedó fuera del temario de las sesiones extraordinarias. Esta era la última chance de tratarla antes de que pierda estado parlamentario. Zoe Tojo pertenece a Consciente Colectivo, una agrupación de jóvenes activistas con militancia socioambiental. En diálogo con Nota al Pie, Tojo expresó: “El poder del triple lobby termina permeando en el Congreso”.
La lucha por una ley para proteger y regular la actividad económica sobre los humedales lleva más de diez años. Desde Consciente Colectivo, la juventud se organiza y, a través de distintas estrategias, se suma a la lucha por una ley de humedales. En el año 2020, lograron un dictamen que unifica varios proyectos enviados. Se trata de la Ley de Presupuestos Mínimos Para la Conservación, Protección y Uso Racional y Sostenible de los Humedales.
La noticia de que una vez más el proyecto fue cajoneado, fue recibida con “frustración e impotencia”, según Zoe Tojo. En este sentido, amplió: “En este año en particular empezó con incendios en grandes partes del país, y entre esos lugares estaban los humedales del Delta del Paraná”.
Esto dejó a las lagunas internas del humedal en estado crítico, sumado también a la bajante del río. Debido a esto, miles de peces y tortugas de agua murieron. Nota al Pie dialogó con Zoe Tojo para profundizar sobre las consecuencias de no tener una ley de humedales.
Continúa la lucha para lograr que la ley de humedales llegue al recinto
Es así como la historia por una ley de humedales deberá comenzar una vez más desde cero, aunque con más esperanza esta vez. Sobre esto, Tojo menciona que “en el marco del día de los humedales, se pronunció el ministro de Ambiente, Juan Cabandié, uno de les integrantes que había presentado el proyecto en 2020, Leo Grosso, y el presidente de la Comisión de Ambiente y Recursos Naturales, a decir que van a presentar el proyecto; el mismo que obtuvo dictamen en 2020”.
Sin embargo, explicó que esto no garantiza aún que la ley llegué a debatirse: “El poder de estos lobbys termina permeando en el Congreso y nuestros legisladores, y genera que nunca exista la voluntad de llevar la ley al tratamiento recinto”, sentenció la militante.
¿Qué es el triple lobby y cómo se relaciona con esta ley?
Además de luchar por una ley, les militantes comenzaron a poner en agenda los intereses que hay detrás. “Podemos identificar como triple lobby a las tres actividades económicas principales que se benefician de la explotación indiscriminada de estos ecosistemas, y que obviamente les interesa no tener ningún tipo de regulación sobre esa actividad”, introdujo Tojo.
La activista amplió: “Estos tres sectores económicos son: el agronegocio, el extractivismo urbano o la especulación inmobiliaria y el sector minero”. Además, agregó: “Si bien la ley no prohíbe terminantemente las actividades y el desarrollo económico sobre los humedales, sí los limita y los sujeta a evaluaciones de impacto ambiental y prohibiciones de ciertas cosas que no se pueden hacer, que generan un daño irreparable en los humedales; por ejemplo: contaminar, bloquear cursos de agua y los incendios intencionales”.
¿Cuál es la influencia entonces de estos negocios? Según explicó Zoe Tojo, desde las organizaciones detectaron que “una de las estrategias que se utiliza para evitar el costo político que tendría votar en contra de una ley que popularmente está muy aceptada, lo que se hace es ni siquiera llegar al tratamiento en el recinto. El lobby tiene una influencia muy importante”.
El trabajo de la militancia, la juventud y las organizaciones
Para la activista Zoe Tojo, el trabajo de las asambleas y organizaciones es clave: “La forma de sobreponernos a este lobby es poner el tema en agenda, para que la presión sea tan importante que se obligue a los diputados a tomar una decisión”. Remarcó la lucha por la ley de glaciares o con la ley de bosques; luchas conquistadas a través de la militancia ambientalista.
En tanto los humedales, el trabajo de difusión de las organizaciones activistas para “acercar a la sociedad y enseñar sobre lo que es un humedal, que hasta hace muy poco tiempo había mucha gente que no lo sabía, me parece muy importante”, afirmó la militante. Además, sostuvo que sirve “para que el Estado tome el rol que tenga que tomar, que es regular la actividad que degrada y daña los humedales”.