Garantizar a las infancias el derecho al arte y la recreación es uno de los objetivos que priman en la Compañía Ulularia Teatro. Este grupo visita los parajes rurales del norte cordobés, lugares donde es difícil acceder a eventos culturales. Elles llevan el teatro para que niñes y jóvenes de la zona puedan disfrutarlo, desde una perspectiva de inclusión social.
Para conocer más sobre su trabajo, Nota al Pie dialogó con tres integrantes de la compañía: Rodrigo Gliardino, Marcela Albrieu y Laura Gallo. Quienes mientras estaban participando en el Festival Titiritodes en el Valle de Calamuchita se tomaron un descanso para responder unas preguntas sobre el trabajo que llevan a cabo.
¿Cómo es esta experiencia de llevar el teatro itinerante a las distintas regiones de Córdoba, en especial en lugares donde hay poco acceso a los eventos culturales?
Marcela- La experiencia de la itinerancia la verdad que es muy positiva, muy grata para nosotres y tiene que ver con los objetivos que se planteó el grupo desde sus inicios. Trabajamos también con otras organizaciones, organizamos también festivales: el Festival Señores Niños en el Teatro (Ahora Señores Niñes).
Próximamente vamos a llevar adelante un proyecto que es el Festival Andante, con dos organizaciones del Movimiento Campesino del Norte de Córdoba; más para el Noroeste. Y eso va a ser dentro de una semana. Vamos a llevar a las distintas comunidades diferentes obras; van varios grupos.
Es una propuesta a partir de la convocatoria que se hizo de Gestionar Futuro del Ministerio de Cultura de la Nación. Preparamos obras que puedan hacerse en diferentes espacios, convencionales y no convencionales. Eso nos permitió hacer funciones incluso hasta con generador, en medio del campo y tiene que ver con la inclusión, con garantizar el derecho al acceso al teatro de todas, todos y todes.
Laura-Esto de la itinerancia también hace que nuestros proyectos desde el inicio, sean pensados para la itinerancia: puestas desmontables, puestas que sean para todo tipo de espacios. En plazas, barrios, comedores, en las cárceles. A veces si no hay equipo de sonido, no hay generador, también va sin sonido.
Hay un gran grado de adaptabilidad a los espacios y a los lugares para que la itinerancia se pueda dar, también pensar por ejemplo en nuestros autos, que puedan transportar las escenografías, la luz y el sonido. Hay todo un modo particular de trabajar la itinerancia.
¿Qué obra están realizando ahora?
Rodrigo- En este momento tenemos varias obras en cartel que estamos haciendo, una se llama «En Burrito a la Escuela» que es de títeres de mesa, otra que se llama «En Una Canasta» que también es de títeres de mesa. «Vive en tu Cuento” que también son narraciones, con la técnica del Kamishibai y acabamos de estrenar una que también es con lenguaje de títeres de mesa y teatro de papel que se llama «De Familias que son Así».
¿Abordan distintas temáticas con las obras? ¿Qué técnicas usan para contar las historias?
Laura-En nuestras historias, trabajamos varios lenguajes también hay una obra «¡Oh! Celo» que en este momento está un poco parada, pero en realidad se sigue haciendo que es una obra de teatro de Clown; en la que trabajan Lucho (que es un integrante que no está en este momento) con Rodrigo y en general, la mayoría de las obras que están en cartel, sí son de títeres y objetos.
En general también están destinadas a las infancias. Siempre mixturamos con narraciones, títeres y muñecos de mesa. En la última obra también está incluido el teatro de papel, de objetos y de mesa, todos juntos en una búsqueda que rompe un poco los límites de estos lenguajes.
En esta última obra de «Familias que son Así» investigamos mucho sobre estas técnicas. Como grupo nos gusta mucho trabajar ahí sobre la mesa, con la narración. Muchas veces trabajamos con textos de autores,de escritores argentinos. En ese caso de la última; a los cuentos los escribimos nosotres, son de autoría propia. Pero también nos gusta trabajar con autores y difundir también la literatura para las infancias de nuestro país.
Ese es el caso de «Viento Cuento» que es una obra de teatro de papel de Kamishibai que es una técnica japonesa que consta de una cajita que tiene láminas con imágenes y se van narrando varias historias.
En el caso de Viento Cuento, son tres historias de dos autoras argentinas que son Graciela Montes y Laura Devetach. Entonces se pasan esas láminas que están en la cajita y vamos narrando y se hace un poco de sonorización en vivo también.
¿Dónde se van a presentar? ¿Cómo puede contactarse quien quiera ver las obras?
Rodrigo-Como dijo Laura, este fin de semana, estamos en el Festival Titiritodxs, vamos a estar hoy en Almafuerte, mañana en Yacanto y el domingo en Córdoba. La semana próxima y la que le sigue vamos a estar de lleno en el Festival Andante, en el Noroeste cordobés en Cruz del Eje, Dean Funes, en Villa Quilino, en Tala Cañada, Paso Viejo y varias localidades y comunas y parajes de aquellas zonas.
Nos pueden encontrar en Facebook escribiendo nuestro nombre en el grupo: Ulularia Teatro y también en el Blogspot que tenemos, nos pueden googlear y van a ver todos nuestros contenidos.
¿Algo más que quieran comentar?
Laura-Otra cosa que queríamos agregar como grupo es que también conformamos un colectivo itinerante que es de Hacedores de las Artes Escénicas de Córdoba que justamente trabajan de esta manera. Van con sus obras de aquí para allá. No trabajamos tanto en salas o en espacios muy físicos; sino que nos gusta viajar con nuestro teatro y compartirlo.
Entendemos que es un derecho y no es para pocos; no es para una élite, sino que es para todos y todas. Y trabajar con este colectivo hace que podamos aunar esfuerzos para articular con los estados municipal, provincial, como nacional. Porque creemos que sin la presencia del Estado, el acceso al arte es muy difícil. Entonces creemos en la articulación; en el trabajo conjunto entre nuestro sector que es independiente, autónomo, autogestivo con el sector estatal.