Como parte de la investigación por el crimen del hincha de Independiente, Juan Calvente, este domingo se detuvieron a dos sospechosos en dos allanamientos realizados por la policía bonaerense en Wilde.
El incidente en el que falleció Calvente ocurrió este sábado sobre la Autopista Buenos Aires-La Plata, a la altura del kilómetro 14 en la localidad de Wilde, durante la previa del amistoso con San Lorenzo.
Allí, un grupo de vecinos del barrio denominado Rancho Grande cortó el tránsito por la falta de luz, lo cual generó el fastidio de los automovilistas por las demoras, que incluso afectaron también al micro que llevaba a los hinchas del plantel. El conflicto surgió cuando varios hinchas y supuestos barras se bajaron del micro con la intención de liberar el acceso por su cuenta.
En el enfrentamiento, también hubo dos heridos, Mario Ricardo Almada (29) y Carlos Ruiz Díaz (32) quienes se encuentran «estables y fuera de peligro», según informó Télam.
Detenidos por el caso
En lo que refiere al caso, el fiscal Elbio Laborde, de la UFI 3 de Avellaneda, ordenó una serie de allanamientos en el barrio donde sucedieron los hechos, allí pudieron dar con los sospechosos.
Los detenidos fueron identificados por una filmación casera que entregó un testigo a la policía. En la grabación los sospechosos aparecen en el lugar del incidente arriba de una moto, uno de ellos portando un arma, con la que el testigo vio disparar hacia el lugar en el que se encontraba la víctima.
Los dos allanamientos se llevarón a cabo este domingo en casas del barrio Rancho Grande, en pasaje San Pedro 1983. Luego de ellos, la policía detuvo a Alan Misael Gil, de 22, y secuestró una moto de su propiedad marca Honda modelo Titán, chapa A054MNC.
Además, se incautaron las prendas de vestir coincidentes con el video y también su celular, con el que se llegó a la segunda propiedad allanada, a cuatro lotes de distancia, en San Pedro 1935.
En dicho domicilio fue aprehendido Mariano Tomás Sánchez, de 21, presunto autor de los disparos. También se le secuestró ropa, celular y un revólver calibre 38 con capacidad de seis balas, que se encontraba descargado y sin marca ni numeración.
En paralelo, la UFI Nº 4, del fiscal Mario Prieto, especializada en violencia institucional abrió una segunda causa por abuso de armas contra la policía y para descartar que el disparo que asesinó a Calvente haya salido de alguna pistola reglamentaria del personal de seguridad, según informó Télam.