Llegaron ya Melchor, Gaspar y el negro Baltazar

Como todos los años, miles de niñes despertaron hoy con la alegría de encontrar en sus zapatos el esperado regalo de los Reyes Magos. La ilusión de juntar el pasto y poner el agua para los camellos, la noche anterior; el ritual de irse a la cama con la convicción de que por fin esta vez sí funcionará vencer el sueño, mientras fingen estar dormides para pescarlos en el momento justo en que dejan los regalos; y la magia de despertar una vez más con los deseos cumplidos, envueltos en coloridos paquetes de todos los tamaños, dibujan en la sonrisa de les niñes la llama que mantiene viva la tradición; y en les adultes la esperanza renovada de que algún día a ningún niñe del mundo le falte su regalo.

En este día especial, Nota al Pie te cuenta las diversas versiones del origen de esta festividad; y cómo se vive esta fecha en otros lugares del planeta.

El origen de la tradición

Cuenta la historia oficial que tres sabios de oriente, estudiosos de las estrellas, recibieron de una de ellas la epifanía del nacimiento de un nuevo rey. En su busca partieron los tres magos. Viajaron a través de Oriente y el Mediterráneo cargados de ofrendas para homenajearlo.

Al llegar a Jerusalén, según la liturgia bíblica de la iglesia católica, fueron a ver al Rey Herodes para preguntarle por el Rey de los judíos que acababa de nacer, a lo que este les respondió que no sabía nada, pero que cuando lo encontrasen le dieran aviso para poder adorarlo.

Los tres reyes magos continuaron su camino, pero en sueños tuvieron la revelación de las verdaderas intenciones de Herodes: matar al niño recién nacido. Cuando llegaron a Belén, encontraron la casa de María y José; y en ella al pequeño Jesús de Nazaret.

Dejaron sus ofrendas de oro, incienso y mirra como muestra de afecto y adoración y partieron. En su regreso evitaron pasar por el camino de Jerusalén para que Herodes no descubriera al niño recién nacido.

La historia en los márgenes 

Cuenta la historia no oficial que lo reyes no eran reyes sino magos y astrólogos; que tampoco eran tres y que Baltazar no fue negro hasta el siglo XVI.

Según la revista madrileña Hola, en un artículo publicado en su portal digital, “las primeras representaciones de los Reyes Magos, que se hallaron en templos del siglo II, mostraban sólo a dos; en las catacumbas romanas hasta el siglo IV aparecían, según los casos, dos o cuatro, y, en la iglesia siria y armenia, siempre se defendió la existencia de doce magos”.

Fue Orígenes, el primer teólogo cristiano, en el siglo III, quien afirmó que se trataba de tres “porque tres fueron los regalos que se hicieron al Niño Jesús”.

En el mismo artículo señalan que fue en el siglo XVI, cuando se adjudicó a Baltasar la raza negra por primera vez debido a que “la Iglesia Católica, decidió identificar a Melchor con la raza europea, a Gaspar con la asiática y a Baltasar con la africana”.

De acuerdo a un artículo publicado en National Geographic “los nombres de Melchor, Gaspar y Baltasar, se los da, en el siglo IX, el historiador Agnello, en su obra Pontificalis EcclesiaeRavennatis”.

El día de los Reyes Magos en el mundo

La celebración del día de Reyes no es universal y en cada país tiene sus propias costumbres.

En España la tradición de dejar regalos para les niñes surgió a partir del siglo XIX; y en 1866 se celebró por primera vez la Cabalgata de Reyes Magos en Alcoy, una ciudad del sureste de España. Esta tradición se extendió por todo el territorio, y fue adoptada por otros países como Perú, oBrasil con la popular Folia de los Reyes Magos.

En Francia se puede degustar en las panaderías la tradicional torta de los reyes o Galette Des Rois. Se trata de una torta de hojaldre que contiene en su interior un haba y va rodeada de una corona de cartón. La persona que encuentra el haba escondida en la torta se convierte en el rey durante ese día y debe colocarse la corona de cartón; también, convidar el Galette del próximo año.

En México acostumbran realizar la tradicional Rosca de Reyes, al igual que el popular Roscón de Reyes de Madrid o el “King´s Bread” estadounidense, tomado de la tradición francesa. Se trata de un pan de masa dulce, de forma circular y ahuecada en el centro adornado con frutas abrillantadas y/o frutos secos, muchas veces rellena de crema pastelera. El país azteca tiene el récord de la rosca más grande,obtenido en 2013, cuando realizaron una rosca de 1,440 metros, con un peso de 9.375 kilos.

El Roscón de Reyes mexicano va acompañado de una pequeña figura del Niño Jesús en su interior. A quien le toca, debe invitar a sus amigues y familiares a tomar atole y tamales el 2 de febrero, día de La Candelaria, fiesta popular celebrada por les católiques en conmemoración de la aparición de una imagen de la Virgen María.

Los Reyes Magos en el cielo y en la tierra

Los Reyes Magos también pueden verse en el cielo. Según la comunidad astronómica, las tres estrellas conocidas como las 3 Marías se ubican en la constelación de Orión, a una distancia aproximada de 20 años luz de la Tierra. Sus nombres astrales son: Alnitak, Alnilam y Mintaka.

Mientras que en la tierra, los restos de los Reyes Magos encontrados en el año 300, por la emperatriz Elena, madre del emperador Constantino, permanecieron en Constantinopla hasta el siglo IX. En ese entonces fueron reclamados por el clero de Milán, Italia, que los trasladó a la Iglesia de San Eustorgio. Cuenta la historia que tres siglos después, cuando Barbarroja, el popular corsario musulmán, saqueó Milán, se llevó las reliquias a la ciudad de Colonia, Alemania, donde luego se erigió la catedral que los conserva.

La monumental catedral gótica de Colonia empezó a construirse en 1248 y no se terminó hasta 1880. Detrás del altar mayor, guarda el sarcófago más grande y majestuoso del mundo donde se dice que descansan, en cajas de terciopelo y envueltos en seda, los restos de los mágicos reyes.

Más allá de la veracidad o no de las diversas versiones que circulan en torno a los Reyes Magos, desde Nota al Pie celebramos la magia de este día en la fantasía de les niñes.