Roberto Sánchez, mejor conocido popularmente como Sandro, fue un cantante argentino nacido en el barrio de Parque Patricios, Ciudad de Buenos Aires, un 19 de agosto de 1945. Fue hijo único y durante su infancia vivió en el barrio bonaerense de Valentín Alsina. En el colegio al que asistía, participó en múltiples actos escolares y en muchos de ellos, imitó a su gran ídolo de la infancia: Elvis Presley.
En su adolescencia ayudó en la economía de su familia, con múltiples trabajos. Y, en su tiempo libre, se dedicó a lo que en verdad él quería y anhelaba: ser músico. En recuerdo a este artista, Nota Al Pie realizará un repaso por la carrera del Gitano, dando cuenta sobre estos inicios como músico y cómo se transformó en una leyenda de la música argentina.
Sus inicios como músico
En 1960. Roberto Sánchez forma su primer grupo musical junto con amigos del barrio y del colegio, llamado Trío Azul. Posteriormente, uno de les integrantes abandona el grupo y se forma «Sandro y Los del Fuego». En esta agrupación, en principio, Sandro era segunda guitarra y segunda voz. Pero con el correr del tiempo, se convirtió en la voz principal de la banda.
La banda ganó rápidamente popularidad y esto despertó el interés de diversos programas de televisión, presentándose en varias oportunidades. En ese entonces, “Los del Fuego” cantaban canciones del rock anglosajón. Sin embargo, Sandro poseía un carácter especial, con una actitud desenfadada. Esto provocó, junto con otros asuntos de índole económicos, la exclusión del grupo de la televisión.
Su carrera como solista
En 1963, Sandro grabó su primer álbum como solista, pero no tuvo el éxito esperado. En un periodo abarcado entre 1963 y 1666, el cantante publicó tres discos más, con resultados dispares, lejos de las luces que habían generado sus intervenciones con “Los del Fuego”.
El cambio radical sucedió en 1967, cuando Sandro obtuvo el primer lugar en el “Festival Buenos Aires”, cantando su canción “Quiero llenarme de ti”. Gracias a este Festival, el músico fue muy escuchado en otros países de América Latina y en Estados Unidos.
En 1968 participó en dos importantes festivales de música: a inicios de febrero en el Festival de la Canción en Viña del Mar, en Chile, y a fines del mismo mes en el Festival San Remo de la Canción en Italia. Sandro aprovechó este envión para continuar publicando albumes en los siguientes años.
Prontamente, el cantante llegaría a actuar en los lugares más importantes del mundo, como el “Madison Square Garden” en Nueva York en 1970. Su creciente popularidad hizo que en 1971 Sandro actuará frente a 60.000 personas en el Estadio de San Lorenzo, en Argentina.
Premios y últimos años
En las décadas del 70 y hasta fines de los 80, el músico participó de múltiples películas, además de continuar desarrollando su carrera musical. Durante este trayecto, Sandro fue galardonado con múltiples premios en reconocimiento a su arte. Obtuvo un Martín Fierro al «Mejor programa musical» que condujo por Canal 13 en 1990. En 1993 recibió el Premio ACE de Oro de la Asociación de Cronistas del Espectáculo de Nueva York. En 1999 le fue otorgado el Premio Carlos Gardel de Oro. Finalmente, en noviembre de 2005, en Los Ángeles, recibió el Grammy Latino por su excelencia musical y trayectoria.
En 1998 Sandro empezó a padecer una enfermedad por ser adicto al tabaco tantos años: enfisema pulmonar crónico. Pese a eso, desde el 16 de octubre de 1998 hasta el 28 de febrero de 1999 se propuso hacer 40 conciertos en el Gran Rex (CABA), para que lo vieran en total 130 mil espectadores. Pese a su débil estado de salud, “El Gitano” completó cada uno de los 40 conciertos.
Su estado estaba tan deteriorado, que en 2001 dio un concierto con asistencia de oxígeno al lado. Pese a todas sus complicaciones, él siempre priorizó estar arriba de un escenario. Llegó un punto en el que necesitó un doble trasplante de pulmón y, finalmente, en 2009 fue operado.
Aunque al principio las cosas fueron bien, a su cuerpo le costó responder a los nuevos órganos y a mitad de diciembre de ese 2009 fue nuevamente operado. Finalmente, tras una dura agonía, falleció el 4 de enero de 2010 en el Hospital Italiano de Mendoza por un shock séptico. La noticia se hizo viral a nivel mundial en cuestión de minutos. “Murió el Elvis Presley argentino”, titularon algunos diarios internacionales. El Gitano partía de esta manera, dejando un importante legado musical, reconocido en todo el continente y amado en nuestro país.