Juan María Traverso (“el Flaco”) nació el 28 de diciembre de 1950 en Ramallo, Provincia de Buenos Aires. Es reconocido como una de las leyendas del automovilismo argentino por su destacado rendimiento a nivel nacional. Hoy festeja sus 71 años.
Los inicios de Juan María Traverso en el automovilismo
Desde chico, Traverso era muy amigo de Mauricio “Marito” García, a quien acompañaba a las carreras cada vez que podía. García, en ese momento, corría en karting. Luego pasó al Turismo Carretera (TC) y «el Flaco» le compró el auto que usaba hasta ese momento. En este contexto, Marito García tuvo un papel fundamental en convencer al papá de Traverso para dejara correr a su hijo.
En un vivo por Instagram con el programa deportivo TNT Sports en mayo del año pasado, «el Flaco» recordó cuando le dijo a su padre que tenía ganas de correr en el automovilismo. Según él, su papá “era de otra generación”, y agregó: “Mi viejo era agrónomo. El día que yo dije voy a correr en autos, mi viejo me dijo: ‘¿Para qué?’ Y me echó de mi casa”, dijo Traverso. Después de este episodio, «el Flaco» se fue a Buenos Aires y trabajó de remisero. Durmió en el remís cerca de un año. Luego, juntó todo lo que ganó ese año y con ese dinero empezó a correr.
Su primera carrera fue el 31 de octubre de 1971 en Pergamino, a bordo del Torino que le compró a Marito García. “Recuerdo el cagazo que tenía cuando iba a largar. Me temblaba el pie, no podía tener apretado el embrague. ‘¿Qué estoy haciendo acá?’”, contó Traverso a Carburando, recordando aquel momento. Al año siguiente, consiguió su primer triunfo en 25 de Mayo con solo 21 años de edad. En 1973 se sumó al equipo oficial de Ford y terminó subcampeón logrando dos triunfos. En 1977 logró su primer campeonato en Turismo Carretera tras ganar siete carreras, tres de ellas en Buenos Aires. También logró el bicampeonato en 1978, con nueve victorias.
En 1979, probó suerte en el automovilismo internacional y partió a Europa a participar de la Formula 2, pero no tuvo mucho éxito. Quedó impactado con los circuitos internacionales, por su diseño, pero se le complicaba con el idioma para comunicarse con su equipo. Decidió volver al país al poco tiempo.
Traverso corrió la primera carrera de TC con un Torino en 1971 y cerró su carrera con otro Torino, el 7 de agosto de 2005. Con 54 años se retiró, y en total ganó 16 títulos nacionales: seis coronas de TC y 46 victorias; siete títulos y 68 triunfos en TC2000; y 19 victorias y 3 campeonatos en Top Race.
Los reconocimientos y la vida actual
Traverso fue reconocido con el Premio Olimpia de Plata en 1991, 1995 y 1999. En el 2000, la Fundación Konex le entregó el Premio Konex de Platino para distinguirlo como el mejor piloto de la década.
En 2019, como parte de la celebración por los 25 años de TyC Sports, la Cámara del Senado de la Nación distinguió al canal de televisión por el cuarto de siglo, reflejando los grandes momentos. TyC Sports aprovechó la conmemoración para compartirla con representantes históricos y actuales de diversas disciplinas deportivas durante los 25 años, entre elles Juan María “el Flaco” Traverso.
Actualmente, Traverso preside la Asociación Argentina de Volantes, una Mutual sin fines de lucro, fundada en 1931 por los pilotos para atender las urgencias médicas de cada accidente en carrera brindándoles un subsidio médico.
“El Flaco” habló sobre la actualidad del automovilismo y qué diferencias ve con respecto a sus vivencias. Así lo dijo en una entrevista con El Cordillerano entrena: “El automovilismo actual tiene una tecnología y un sistema que eliminó al piloto. El auto es tan importante, que gana el auto. Lo positivo es la seguridad que tiene”, resaltó.
Traverso tiene su museo en Ramallo, inaugurado el 20 de octubre del 2018, donde muestra todos sus trofeos y 16 de sus autos originales; entre ellos, el auto con el que debutó y con el que se retiró en 2005. El público que quiera ir, tiene que anotarse por Facebook y lo recaudado va para un centro sanitario local. En cada visita, los visitantes pueden, además de ver todos los autos de Traverso y su palmarés, hablar personalmente con él.