Luego de la crítica situación en Europa por la rápida propagación de la nueva variante Ómicron, el alcalde de Londres, Sadiq Khan anunció la cancelación de las celebraciones públicas la noche de Año Nuevo. El aumento de los casos superaron los 140.000 durante la última semana, triplicando los de la primera del mes.
El Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC) informó que ya existe una transmisión comunitaria de la variante Omicron en el continente. Además, según señaló el organismo se espera “un nuevo y rápido aumento de los casos en los próximos dos meses”.
Debido al impacto en los servicios sanitarios de la capital con un aumento del 29% en internaciones hospitalarias, desde el sábado pasado Khan declaró a la capital del Reino Unido en estado de emergencia.
En este sentido, el alcalde indicó en un comunicado que con los niveles récord de infecciones en la ciudad y el Reino Unido, está determinado a “hacer todo lo posible para reducir la propagación de la nueva variante”. Y agregó que “y garantizar que nuestros servicios de salud pública no estén saturados éste invierno».
Europa avanza con las restricciones
En este contexto, las restricciones volvieron a imponerse en varios países europeos por la rápida propagación de la variante Ómicron. Tal es así que, el primer ministro de Francia, Jean Castex, también anunció que este Año Nuevo no se permitirán los fuegos artificiales ni las reuniones en la vía pública. “Estarán prohibidas las reuniones, el consumo de alcohol en la vía pública e invitaremos a los municipios a renunciar a los fuegos artificiales”, apuntó Castex.
Además, otra medida obligatoria será que les trabajadores sanitarios y bomberos deberán aplicarse la dosis de refuerzo de la vacuna contra el Covid-19. El objetivo central de la misma será evitar que se generalicen los focos de contagios.
Por otra parte, el gobierno de Países Bajos dictó un confinamiento estricto que comenzará este domingo. En él, el primer ministro, Mark Rutte, anunció que se incluirá la fecha de las Fiestas y durará hasta mediados de enero. «Es algo inevitable por la llegada de la quinta ola y por la propagación, más rápida de lo esperado, de Ómicron” explicó Rutte en conferencia de prensa.
La alarma llegó a América Latina
Ante la llegada de la variante Ómicron a Brasil, la ciudad de Río de Janeiro decidió suspender su concurrida fiesta de Año Nuevo. Así lo anunció el alcalde, Eduardo Paes a través de su cuenta de Twitter. “Vamos a cancelar de esta forma la celebración oficial de la fiesta de año nuevo en Río”.
Respeitamos a ciência. Como são opiniões divergentes entre comitês científicos, vamos sempre ficar com a mais restritiva. O Comitê da prefeitura diz que pode. O do Estado diz que não. Então não pode. Vamos cancelar dessa forma a celebração oficial do réveillon do Rio.1/2 pic.twitter.com/BsFTbIprNQ
— Eduardo Paes (@eduardopaes) December 4, 2021
Asimismo, se ha decidido cancelar los tradicionales festejos con música y fuegos artificiales para evitar el aglomerado masivo de gente. En este sentido, Paes añadió que “tomo la decisión con tristeza, pero no podemos organizar la celebración sin la garantía de todas las autoridades sanitarias. Lamentablemente, no podemos organizar una fiesta de este tamaño, en la que tenemos muchos gastos y logística involucrados, sin el tiempo mínimo de preparación”
En el caso de Perú la situación es similar. Allí no sólo será obligatorio el certificado de vacunación para quienes ingresen a comercios, bancos, oficinas y aeropuertos, sino también se prohibieron por decreto las reuniones para Navidad y Año Nuevo.