El flamante presidente de Chile, Gabriel Boric, fue uno de les protagonistas de la denominada “Revolución de los pingüinos”. Una rebelión estudiantil que se produjo en suelo trasandino en el 2006, donde el principal reclamo fue una “educación gratuita y de calidad” (en el país vecino la educación es privada).
En esos acontecimientos, se destacaron las figuras de Camila Vallejo, Giorgio Jackson y Boric.
Con un año para recordar, el político de 35 años se convirtió en el candidate más joven en llegar a la presidencia de Chile. En las elecciones primarias de julio fue el candidate más votado y, según las encuestas, se impuso de manera inesperada a su rival, el comunista Daniel Jadue.
En las últimas semanas consiguió el apoyo de muches referentes sociales y sobre todo de los partidos de centro izquierda (quienes en un comienzo lo criticaban). Esta circunstancia fue importante para sentirse respaldado y posicionarse mejor de cara a las generales.
Vengo del sur
Gabriel Boric nació el 11 de febrero de 1986 en Punta Arenas. Allí, en la ciudad continental más austral de Chile, asistió a la escuela primaria y secundaria en The British School.
En 2004 se trasladó a Santiago para estudiar la carrera de Derecho en la Universidad de Chile. Fue profesor ayudante de las cátedras de Teoría de la Justicia, Historia Institucional de Chile y Derecho Internacional de los Derechos Humanos.
En 2008, dos años después de la revolución estudiantil del 2006, fue elegido consejero de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile. Ya en 2010 fue presidente del Centro de Estudiantes de Derecho de la misma institución educativa.
Por ese entonces, afianzó su vínculo con la política y militancia cuando ingresó al colectivo Izquierda Autónoma.
Candidato a diputado
Hace 10 años, Gabriel Boric decidió presentarse como candidato a diputado como representante del colectivo en el que participaba.
Por su parte, les otres máximes referentes de la “Revolución de los pingüinos” de 2006, Camila Vallejo y Giorgio Jackson, fueron por el espacio liderado por la ex presidenta Michelle Bachelet, Nueva Mayoría.
Como legislador intentó trabajar de la mano con sus antiguos compañeres de lucha, aunque no siempre lograron acuerdos. También buscó acercar posiciones con la joven Karol Cariola, del Partido Comunista.
Renovación en la izquierda
El nuevo presidente del país trasandino fundó en 2016 el Movimiento Autonomista. Según un informe de Télam, lo hizo con el objetivo de configurar una renovación de la izquierda sectaria chilena.
También con el fin de acelerar el surgimiento de una alternativa a las dos coaliciones que predominaban el sistema político chileno. La centroizquierda (ex , actual aliado) y la centroderecha que respaldó a Sebastián Piñera en sus mandatos.
Ya formando parte de la alianza Apruebo Dignidad, venció a su rival Daniel Jadue en las elecciones presidenciales primarias de 2021, siendo el candidate más votade. Sin embargo, en la primera vuelta presidencial logró un segundo puesto detrás del simpatizante de la dictadura pinochetista, José Antonio Kast.
Fuego amigo y estrategia política
Boric centró su campaña electoral en la ampliación de derechos, la descentralización del país y el ambientalismo. También en poner fin a la herencia institucional que dejó el período que gobernó Arturo Pinochet. Además, abogó por el respeto a los pueblos originarios. Estos fueron muchos de los reclamos principales del estallido social de 2019, que forman parte de la agenda de la Convención Constituyente.
Recibió muchas críticas en la primera vuelta por parte de los que hoy son sus aliades. Consideraban que era improvisado y poco experimentado, entre otras críticas.
Para sumar votos y acercar posiciones de cara al ballotage, moderó su discurso e invitó a les líderes del arco opositor a dialogar.
Esta postura fue cuestionada históricamente por partidos y polítiques afines. Por ejemplo, cuando participa por una Mesa por la niñez propuesta por Piñera, que desató un catarata de ataques por Twitter por parte de Camila Vallejo y Karol Cariola, que Boric se dedicó a contestar uno por uno.
Nuevo panorama para la región
A pesar de que no fue su As de espadas en la segunda vuelta, se diferenció de su contrincante al recordar la simpatía y el apoyo explícito que Kast tiene por Pinochet y todo lo que representa.
Luego de este largo camino, Gabriel Boric se convirtió en el nuevo presidente de Chile. De esta manera, se constituye un nuevo mapa político en Latinoamérica, con la figura de Lula en Brasil, que se hace cada vez más fuerte, y con un Alberto Fernández que ya comenzó su campaña electoral para lograr la reelección en Argentina.