Hace pocas horas, la isla caribeña se convirtió en el país más joven del mundo. Si bien desde 1996 era formalmente independiente del Reino Unido, esta madrugada se traspasó del histórico sistema de gobierno monárquico hacia el sistema republicano. En los primeros minutos de este martes, Sandra Mason juró como presidenta.
El Parlamento de Barbados ya había votado por unanimidad el 29 de septiembre enmendar la carta magna, terminar con la asociación del país con la Corona Británica y dar a la isla el estatus de República. Sin embargo, el acto de conversión de Barbados fue elegido en la fecha del aniversario número 55 de su independencia del Reino Unido.
La ceremonia que se celebró en las primeras horas de este martes (1AM Argentina) contó con la presencia del príncipe de Gales, hijo mayor de Isabel II. El invitado de honor asistió como representante de Isabel II pero también en su condición de sucesor en la jefatura de la Commonwealth. Curiosamente, se le otorgó la Orden de la Libertad de Barbados, el más alto reconocimiento nacional.
Sandra Mason
Con una carrera de maestra y secretaria, la nueva presidenta de Barbados fue la primera mujer en ser admitida en el colegio de abogados del país. Con 72 años, Mason ocupa el cargo más importante del país. Anteriormente ocupado por un extranjero en la figura de gobernador general. Este cargo era nominado por el primer ministro del país pero debía ser designado por la Corona Británica.
En octubre de este año, Mason había sido elegida para convertirse en la primera presidenta del país. En su primer discurso oficial, saludó y expresó “me uno a ustedes en celebración de una nación, de un pueblo y de un futuro que ahora está en nuestras manos”.
La festiva celebración del país famoso por sus playas paradisíacas y sus aguas cristalinas, incluyó desfiles militares y demostraciones de danzas y música nacional. Además, fueron convocades un grupo de ciudadanes que fueron distinguides con títulos honoríficos.
Entre les invitades destacades se encuentra la cantante Rihana, quien fue distinguida como heroína nacional. La primera ministra Mia Mottley fue quien le entregó el título y agradeció su “extraordinario compromiso con su tierra natal”. Aludiendo a uno de sus grandes éxitos, Mottley expresó “que puedas seguir brillando como un diamante y llevar honor a tu nación”.