En el marco del día Internacional de las Defensoras de Derechos Humanos, este lunes harán la presentación de su nuevo libro. Se trata de una investigación con enfoque de género y de producción colectiva, en la que estudian las múltiples violencias; una de ellas es el estereotipo que pesa sobre las mujeres acerca de la conducción.
Nota al Pie dialogó con Mariana Sena de la asociación Compromiso Vial de Rosario, quienes presentan el libro “Compromiso Vial por la Igualdad de Género: ideas y aproximaciones desde la mirada feminista”. Un tema del que poco se habla y poco se investiga, ahora tiene un nuevo aporte de la mano de la ONG de Rosario.
La ONG rosarina vuelve a poner el tema en la mesa de diálogo, con una publicación que fue declarada Interés Municipal por el Concejo de Rosario. El libro tendrá sus dos versiones: digital y físico; distribuidos de manera gratuita y se puede descargar acá.
La invitación es este lunes 29, en el Monumento a la Bandera, Rosario. Acompañarán el evento artistas locales como las Fieras Sambareggae, Vasilik y Sonando América. Además, la producción cuenta con aportes de referentes del feminismo nacional como Ana Falú e Ingrid Beck.
¿Cómo surge la idea de la producción del libro?
Ya desde 2018, venía dando vueltas la idea de una producción que dé cuenta de estas cuestiones que discutimos dentro de la ONG y vemos sin hacer usos de estadísticas, sino que, lo vemos en los casos que asistimos donde la mayoría son mujeres y porque empezamos a tejer algunas cuestiones. Por ejemplo, esa construcción del macho beligerante, del macho provocador, se veían muy claro en la cantidad de personas que comenten en siniestros viales: en picadas, en manejar ebrios, etc. La mayoría siempre tiene como responsables a varones. Entendemos que si estos casos no se ponen en escena es muy difícil reconstruir.
¿Cuáles son los interrogantes que motivaron este trabajo de investigación?
La presencia de lo femenino en Compromiso Vial siempre ha sido muy fuerte. El origen de esta ONG es la lucha de una madre y su hija, Micaela Notz y Mónica Gangemi, que es la fundadora, en memoria de Úrsula Notz. Ya tiene más de 16 años esta organización y como grandes temas que atraviesan de forma transversal es lo que nos sucede como ciudadanía: la relación del apego a las normas, el registro del otre; como aparece en el escenario la violencia, nosotres denominamos “violencia vial” pero que es una sola la violencia: marcar una situación de territorios y de desigualdades muy profundas.
El texto fue planteado como preguntas que fueron desarrolladas en capítulos. Las tres facilitadoras de estos debates son María Florencia Bottazi, Cecilia De Michele junto con Pia Lesgart. Las tres son profesionales de distintas disciplinas.
Hay aún hoy una mirada muy estereotipada de la mujer al volante ¿Qué dicen los datos en realidad?
Sí, porque en los siniestros viales cuando hay heridos graves, siempre es con dolo. Es decir, hay una intencionalidad. Una actuación del desprecio por la vida, no es sin querer hubo una actitud dolosa hacia otre y hacia une misme también. Hubo alcohol, hubo no respeto de normas; una decisión de realizar estas maniobras. Justamente nuestro trabajo es poner en crisis eso y desmontar estos conceptos que están muy ligados fuertemente al poder, como imaginamos estas figuras en la sociedad. Yendo así es un camino a normalizar el sufrimiento, el dolor y la tragedia y nosotres venimos a decir que no, que esto hay que cambiarlo.
En el libro hay aportes de dos referentes feministas en esta publicación, Ana Falú e Ingrid Beck ¿Cómo fue trabajar junto a ellas?
Propusimos hacer un encuentro virtual, en el contexto de pandemia, junto a una persona que nosotros respetamos muchísimo que es Ana Falú. Es una activista social muy respetada, es muy imponente su laburo siempre, y la invitamos en ese encuentro virtual. Fue muy chiquito pero muy intenso, a partir del vínculo que generamos con Ana, se ha incorporado un capítulo de manera generosa, como es ella, para que lo incluyamos en el libro.
Hay un objetivo claro: lograr una movilidad segura, inclusiva y en condiciones de igualdad para la ciudadanía en su conjunto ¿Cuáles serían los primeros pasos?
La participación activa política; y política en su sentido más amplio. No solo la política institucional, educativa, cultural, barrial y en su más amplio sentido también. Cuando digo cultura hablo de expresiones artísticas, todo tipo de expresiones que tengan que ver con poner esto en escena, buscar la manera de que cada vez sea más visible. No hay manera de avanzar si hay tanta incongruencia, sin justicia, sin decisiones.
¿Hay poco de seguridad vial con perspectiva de género? Este libro es la invitación a discutir la temática y generar mayor igualdad
Por suerte y gracias a los distintos movimientos que se han venido suscitando con mucha presencia de mujeres en las calles y poniendo esto en un escritorio. Hay una larga tradición, desde lo colectivo. Esto viene a sumar a lo que ya está en marcha. Hay algunos espacios que son un poco más impenetrables pero otros que están involucrados. Por ejemplo, hoy ya nadie piensa en una mujer que maneje un camión sea una contradicción, aunque, hoy sea una noticia sabemos que está arraigado a una idea muy arcaica y muy empobrecida de lo que es movilidad.
La invitación es que la gente se acerque y participe. No es que vengan porque no les queda otra, sino que empaticen con la situación, entender que es algo que pasa a toda la sociedad y sentir que hay que formar parte de estas preguntas y soluciones.