Una Marcha de Antorchas está pautada para la tarde de hoy en la Ciudad de Buenos Aires. La manifestación será realizada por el personal de enfermería que depende del gobierno de la ciudad; en reclamo del ingreso a la carrera profesional. La actividad tendrá lugar a las 18:30 horas, comenzará en el Congreso y tendrá como destino Plaza de Mayo. Bajo la consigna “Orgullosamente Enfermería” aspiran a visibilizar diversos reclamos, entre ellos un incremento de salarios dado que el actual no cubre la canasta básica.
Para conocer en detalle las exigencias, Nota al Pie dialogó con Andrea Ramírez, referente de la Asociación de Licenciados en Enfermería (ALE) y trabajadora del Hospital Ramos Mejía.
-¿Cuáles son las problemáticas que afectan al personal de enfermería de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires?
-El personal de enfermería, es el sector mayoritario del sistema de salud, y a la vez, el más explotado. En CABA, la ciudad más rica del país, las más de 10 mil enfermeras/os cobramos salarios por debajo de la canasta de pobreza. Por eso, predomina el pluriempleo, que nos enferma, para poder llegar a fin de mes. Casi el 50 % del personal de enfermería se profesionalizó en los últimos 15 años: tenemos formación universitaria, licenciatura. Sin embargo, no estamos reconocidas como “personal de salud”, sino como “administrativas”.
Pero hay más: no tenemos derecho a la capacitación en servicio, como otras profesiones de la salud. Entonces, capacitarse no es una política pública, sino un sacrificio individual enorme que hacemos, mayormente mujeres. Nosotras nos repartimos con las tareas de cuidados, que pagamos de nuestro bolsillo y que se suma al pluriempleo. Más todavía: durante la pandemia se contrató personal en CABA, y ahora se lo despide, en lugar fortalecer el servicio de salud. Esto, en CABA con el gobierno de Larreta conecta con una orientación: vaciar lo público y jerarquizar lo privado. Es lo que se hace. Por eso, nos postergan, nos mal pagan y nos precarizan. Por eso reaccionamos.
-¿Cómo afectó la pandemia al personal de enfermería?
-Anote este dato: 228 enfermeras murieron de COVID en la primera línea cuidando al pueblo y 10.000 nos contagiamos. Es decir: nosotras cumplimos nuestro rol social y el poder político nos desprecia. Y esto se multiplica en la provincia de Buenos Aires, en municipios del Conurbano como Matanza y en el interior del país ni hablar. Por eso, nos organizamos, por eso la ALE como sindicato independiente de la enfermería, crece y se proyecta.
-Uno de vuestros reclamos se basa en que al personal de enfermería no se lo incorpora en la carrera profesional. ¿Cuáles son a vuestro entender los motivos por los cuales no se efectiviza esa incorporación?
–Tenemos el tema estudiado, analizado y de ahí, desprendemos una estrategia: hay un régimen de poder y negocios en el sistema de salud de CABA que tiene postergada a la enfermería. Por eso, aprobaron una Ley de la Carrera Profesional de la Salud (una especie de convenio colectivo de la salud), incluyeron 24 profesiones, entre ellas hay hasta sociólogos o licenciados en estadística. Ellos están en la carrera profesional. Sin embargo, a la enfermería la dejaron afuera. ¿Por qué?
Primero, porque la conducción de SUTECBA se opone: si pasamos a la carrera profesional, dejamos de ser afiliados municipales. Por lo tanto, “pierden” millones en cuota sindical cautiva.
Segundo, la conducción de la corporación médico-hegemónica de CABA, la Asociación de Médicos Municipales –a la cual pertenece orgánicamente Quirós, por ejemplo- bloquea nuestra inclusión. Eso lo hacen porque como profesionales de carrera tendríamos derecho a concursar por cargos de dirección y gestión. Ese monopolio, la “élite” médica, no lo negocia.
Tercero, a Larreta le sale más “barato” una enfermería no-profesional. Así, contribuye a abaratar el mercado laboral privado para sus amigos y financistas, del empresariado de clínicas y sanatorios. La enfermería con salarios deprimidos en el sistema público, es mano de obra barata para el privado.
Contra esos intereses, luchamos.
-Ustedes realizarán hoy por la tarde una Marcha de Antorchas. ¿Cuál es el motivo por el cual han optado por esta modalidad de manifestación?
–Esta es la 2° Marcha de las Antorchas. La primera fue un hito, en mayo en el Día Internacional de la Enfermería. En aquel momento tuvo mucho de homenaje a nuestros muertos por COVID en la primera línea. Ahora, la vamos a repetir con una consigna: “Orgullosamente Enfermería”. Ese fuego de las antorchas simboliza a la enfermería que “se encendió”. Es algo que ya no se apaga más, como sector consciente de sus derechos y fuerza, dentro del equipo de salud.
-La situación actual del personal de enfermería, ¿de qué modo impacta en la prestación de los servicios de salud?
-Jerarquizar la salud pública, como en cualquier servicio público, arranca por el personal que lo sostiene: la enfermería y el equipo de salud. Somos quienes movemos todo en los hospitales. Por lo tanto, un trabajador extenuado por el pluriempleo, frustrado por no poder capacitarse, con una calidad de vida mala, presta obviamente un servicio por debajo de lo que podría si tuviera condiciones dignas. Ahora bien, nuestra enfermería, es un orgullo. Por eso, la sociedad, el pueblo que viene a los hospitales públicos, nos reconoce. Nos respalda y quiere. Y eso nos lo ganamos cuidando al pueblo. Noche y día.