El fin de semana pasado, una vez mรกs, se realizรณ el recorrido nocturno por el cementerio San Juan Bautista. Se trata de una propuesta turรญstica para revalorizar el despliegue arquitectรณnico, repasar los principales aportes de renombradas figuras que descansan allรญ y revitalizar el misticismo de leyendas fantasmales que hasta el dรญa de hoy forman parte de la conciencia colectiva.
Esta iniciativa es impulsada por la Municipalidad de Corrientes, y la visita estuvo guiada por Alexis Dabat, gestor cultural y asesor del gabinete de turismo, cultura y deportes, ademรกs, de Eleonora Luque, arquitecta y docente. Cabe destacar que parte del cementerio estรกn seรฑalados por la ordenanza 5049/09 como de Interรฉs Patrimonial Municipal.
Habรญa una vez un cementerioโฆ
En un cementerio, a las afueras de la ciudad, un centenar de personas esperan ansiosas las siete de la tarde del ante รบltimo sรกbado de noviembre. Quรฉ cosa mรกs tenebrosa ir al โcomo se lo conoce en Corrientes- โbarrio de los pies juntosโ al anochecer. Y es que despuรฉs de mucho, el recorrido regresรณ y esa era la hora prevista.
Mientras que por el acceso principal continรบa ingresando gente, escoltados por un cordรณn de agentes de sanidad, encargados de administrar alcohol en gel y repelente, en el interior del predio hay otras que ya logran visualizar los imponentes monumentos y panteones mรกs antiguos de la ciudad
-ยกQuรฉ cantidad de muertos!, se escucha decir a una seรฑora.ย
Y un poco mรกs allรก, y sin que esta escuche, alguien dice: y sรญ, seรฑora, es un cementerio.
Ante el murmullo de todes, alguien pidiรณ silencio para poder iniciar con el recorrido. Alexis Dabat, comenzรณ relatando que antiguamente los conventos e iglesias tenรญan sus propios cementerios, y que incluso dentro de las mismas se sepultaban a las personas mรกs destacadas o quienes hayan cumplido con labores importantes dentro de la comunidad.
Sin embargo, en 1826, el entonces gobernador, Don Pedro Ferrรฉ creรณ un cementerio general pรบblico, prohibiendo los entierros en las iglesias. Cuando se produce la epidemia de la fiebre amarilla, un tribunal mรฉdico dispuso nuevos espacios a las afueras de la ciudad. Entonces, es la familia de Josรฉ Marรญa Durรกn, quien dona las primeras hectรกreas para el cementerio โSan Juan Bautistaโ.ย
Por ello, algunas de las familias mรกs acaudaladas decidieron trasladar los monumentos y los restos de sus seres queridos a este nuevo lugar. Asรญ, les visitantes llegaron hasta uno de los primeros panteones. El de la familia Dรญaz de Vivar, que resguarda los restos de Justa Dรญaz de Vivar, quien fuera la primera mujer correntina que llevรณ la pintura y el arte a importantes museos.
A medida que el sol fue desapareciendo, la columna de gente fue observando cada uno de los 25 panteones que integraban el recorrido. A simple vista, y quizรกs solo por si las moscas, mรกs de une estuvo atento a todo tipo de ruidos y sin apartarse del grupo, ya sea para evitar perderse detalles de los relatos o bien para evitar โla fรกbula de las pelรญculas de terrorโ (pues el que primero desaparece, primero muere).
El coronel dijo que no, el amor dijo tal vez, y la muerte dijo sรญ
El sol ya no estaba y las linternas de los celulares iluminaron con intensidad el panteรณn de la familia Dante. Aunque en este caso lo mรกs curioso es la historia que emerge del lugar. Esta es una de las historias presentadas como โde amor y de tragediaโ que ocurrieron un siglo atrรกs y que resuenan hasta el dรญa de hoy.
โEn 1920 Sarita fue protagonista de una historia cuando se enamora de un hombre que no estaba, para la sociedad de la รฉpoca, a la altura del prestigio social de su familiaโ, comenzรณ diciendo Dabat. La joven tenรญa 15 aรฑos, hija del Coronel Desiderio Dante y enamorada de un soldado del regimiento de infanterรญa nยฐ 9.
La historia indica que la familia Dante, ante la negativa de esta relaciรณn y bรกsicamente por tener poder econรณmico, decide mover algunos contactos para sacar al soldado de la vida de su hija Sara. El soldado fue reubicado en la provincia de Formosa.
Sin embargo, y por esas cuestiones inexplicables de la vida โSara decide tomar un veneno y morir por amorโ, relatรณ el guรญa al mismo tiempo que les visitantes realizaban una expresiรณn igual de inexplicable, arraigada a un romanticismo absurdo y antiguo como las mismas bรณvedas que les rodeaban.
En fin, la historia continua con que โtodos participan de las exequias y es llevada en un ataรบd blanco, vestida de blanco y en una carrosa blanca para demostrar que ella habรญa muerto en la pureza virginalโ, dijo el guรญa. Un aรฑo despuรฉs, el enamorado regresa de Formosa y la vista en el panteรณn dejando una placa de mรกrmol rosado con la inscripciรณn โholocaustoโ, porque โella habรญa muerto en holocausto de amorโ, asegurรณ.
Y como si todo esto fuera poco, esta historia fue tan renombrada que la contaron en una revista de tirada nacional. Pero era tanta la negativa de los padres de Sara que โimpidieron que la revista llegue a la provincia de Corrientes comprando todos los ejemplares, pero alguna se filtrรณ y quedรณ en algรบn archivo con esta historiaโ, dijo.
Dabat concluyรณ el relato asegurando que โella descansa aquรญ junto a su padre y a su familia, en este panteรณn que hoy la recuerdaโ. Despuรฉs de un siglo solo queda decir que, si hay amores con una fuerza imposible de controlar, envenenarse nunca debe ser una opciรณn, porque en nuestros dรญas, se corre el riesgo de que nadie pueda pagar una placa de mรกrmol. Ante la duda, siempre, lo mejor es vivir.
Una historia para que โllamen al 107โ
Mientras el repelente en spray era lo รบnico que ofrecรญa resistencia ante los mosquitos de temporada y les guardias urbanos merodeaban el sitio del recorrido observando atentamente todo lo que pasaba, un primer hecho agitรณ la respiraciรณn de muches: se cortรณ la luz. Los cortes de luz en primavera-verano son insufribles, pero mucho mรกs si te encontrรกs con gente desconocida, en plana noche y en un cementerio.
Era 20:40 y la explicaciรณn natural de lo que habรญa pasado no se hizo esperar. Quizรกs para algunes el recorrido se hizo muy largo, por lo que decidieron caminar a su paso, con tanta mala suerte que se llevaron unos cables por delante, dejando sin luz ese sector del cementerio. Una vez solucionado el desperfecto, las radios Handy de los guardias dejaron de emitir cรณdigo indescifrable como el โcinco, cinco. Te copioโ.
Mรกs tarde, Alexis Dabat, cediรณ la palabra al historiador Miguel Gonzรกlez Azcoaga, encargado de relatar la siguiente historia. Para este relato es indispensable imaginarse la siguiente escena: un seรฑor, a quiรฉn no hace falta identificarlo, se encontraba desesperado ante la enfermedad de su esposa e hijo, quienes sufrieron la epidemia de tuberculosis.
El protagonista de esta historia โtomรณ una decisiรณn que no querรญa, que era salir a robar. Con tanta mala suerte que lo atraparon, por inexperto. Estando detenido le comunican que su esposa muriรณ y que dos guardias lo acompaรฑarรกn al sepelioโ, dijo el historiador. El potencial circunstancial de esta historia es que en ese momento se desata una tormenta que genera caos y revuelo.
Gonzรกlez Azcuaga cuenta que โel viudo se resguarda en medio de algunos de estos panteones, esperando que escampe. Pero ve una mujer con la que se detiene a hablarโ. La historia cuenta que, en medio de esta charla, esta mujer le otorga un anillo para que pueda solventar los gastos para el tratamiento de su hijo.
Con el correr de los dรญas, uno de los familiares de esa mujer se presenta en la comisarรญa, reconoce aquel anillo y asegura que su hermana fue sepultada con ese objeto preciado. Hasta el dรญa de hoy nadie puede explicar cรณmo es que ese anillo llegรณ a otras manos, ya que no habรญa seรฑales de forcejeo en aquel panteรณn.ย
Un imprevisto
Ante la mirada cuidadosa de les expectantes, el relato se vio interrumpido cuando una mujer gritรณ:
-ยกpolicรญa!ย
y otra, casi al mismo tiempo dijo:
-โยกque llamen al 107โ.ย
Y hasta podemos agregar a una tercera preguntando asustada;
-ยฟQuรฉ pasรณ?
Y es que, como si fuera un meteorito que impacta sin aviso sobre la tierra, una joven mujer se desplomรณ y cayรณ al suelo. Centรฉsimas de silencio hicieron falta para que aquellos ojos se dieran cuenta de lo que habรญa pasado.
En ese momento el barrullo acoplรณ la situaciรณn. Voces temblorosas que pedรญan una ambulancia, otras que en un santiamรฉn de segundos diagnosticaron como desmayo, otras como convulsiรณn, y otras que simplemente gritaron. Inmediatamente la guardia urbana se hizo presente y la asistieron. Se la llevaron y Dabat apaciguรณ la situaciรณn afirmando โhay un enfermero y estรก el servicio mรฉdico del municipio que la van a atenderโ. Una mujer se habรญa desmayado.
Afortunadamente llegรณ el final
El recorrido continuรณ hacia uno de los panteones que esconde otra historia de amor y tragedia: La historia de los Pampรญn Meabe. Sin embargo, despuรฉs del inesperado desmayo de la joven, el clima tenso que se generรณ hizo que esta historia fuese escuchada con otro misticismo.ย
Para finalizar, el recorrido llegรณ hasta el panteรณn de la familia de Josรฉ Ramรณn Vidal, quien fuera mรฉdico y senador nacional, โy en el momento en que se produce la epidemia de la fiebre amarilla, dejรณ su banca para salvar la vida de muchos correntinosโ, dijo Dabat.
Ademรกs, contรณ que โRamรณn Vidal muere contagiado de esta enfermedad y por eso este panteรณn es monumento histรณrico nacionalโ. Por otra parte, se rescatรณ que en ese mausoleo tambiรฉn se encuentran otras personalidades que dejaron su impronta en la ciudad.
De esta manera, ante la calma de un sรกbado de noviembre, caluroso y seco, concluyรณ el recorrido nocturno por el Cementerio San Juan Bautista. No hay manera de asegura que quienes hayan participado de esta travesรญa concibieron el sueรฑo rรกpidamente, pero sรญ estamos en condiciones de asegurar que este recorrido no es para todes. Les fallecides y las historias siempre estรกn. Bastarรก visitarlos para conocerlos.