Luego de varios meses de desinterés y silencio por parte del Instituto Nacional de Servicios Sociales Para Jubilados y Pensionados (PAMI) e Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA), la Federación de Bioquímicos de la Provincia de Buenos Aires (FABA) sostiene un reclamo en torno a la recomposición de los aranceles.
FABA es una asociación civil y privada. Nuclea a diez distritos que agrupan a profesionales universitaries legalmente autorizades para el ejercicio de los análisis clínicos. Estos distritos se corresponden con las zonas sanitarias del Ministerio de Salud provincial.
En un comunicado del pasado 2 de noviembre, la Federación denunció lo que calificaron como una discriminación hacia el sector Bioquímico. La utilización del término radica en que les bioquímiques argentines disponen de mejoras arancelarias menores a las del resto de les prestadores.
Afirman que, pese a las promesas de les funcionaries, la pauta arancelaria es inferior al 45% anual de incremento acordado por les empleades de laboratorios. El reclamo consiste en lograr una mejora del 11% para alcanzar la paritaria común de sanidad, quienes obtuvieron un 45% en varios tramos.
Antecedentes del conflicto
FABA informó que PAMI había dispuesto una mejora para el sector bioquímico del 28%. Ello en detrimento de la mejoría lograda por el resto de les prestadores, la cual era del 34%. Por ello, junto a la Confederación Unificada Bioquímica de la República Argentina (CUBRA), FABA reclamó el reconocimiento del porcentaje diferencial.
El 18 de agosto, contrario a lo acordado, PAMI publicó la Resolución 1188/2021. La misma disponía ese incremento para la totalidad de les prestadores con excepción de les bioquímiques. En septiembre del presente año, anunciaban la posibilidad de adoptar algún tipo de medida de acción directa ante la contradicción de la institución.
Afirmaron que se tornaba inviable la continuidad del mismo sistema prestacional que se viene otorgando. Consideran que en ocasiones se lograba a costa de sacrificios por parte de la Federación, sobre todo por el incremento de los valores de los insumos.
Asimismo, la situación empeoró debido a la entrada en vigencia, a partir de octubre de 2021, de un nuevo contrato prestacional que aseveraron desconocer. Denunciaron falta de comunicación directa con las autoridades del Instituto.
“Solicitamos al PAMI que proceda a disponer un incremento adecuado de los valores correspondientes a la cápita y a la Unidad Bioquímica”. Estos se encuentran “contemplados en los módulos referidos a las prestaciones bioquímicas, de acuerdo a los convenios prestacionales que el INSSJyP ha firmado con las entidades integrantes de la CUBRA””. Así lo afirmó la Dra. María Alejandra Arias, presidenta de CUBRA.
Desidia desde PAMI y IOMA
La Federación afirmó que en la última reunión de fines de octubre junto con les representantes de PAMI, las autoridades de FABA expresaron su preocupación. Sin embargo, les representantes les solicitaron enviar una carta detallada del conflicto. Pese a su presentación, la misma aún no tiene respuesta oficial.
IOMA no ajustó el porcentaje de pauta arancelaria para les profesionales bioquímiques. En las reuniones con la Federación, a lo largo de octubre, ofrecieron un porcentaje menor al 45%. Fue rechazado, ya que incumple el compromiso primario acuñado por sus autoridades.
Asimismo, la situación es una cuestión históricamente excepcional. Según advierten, desde la pauta arancelaria se acompañó siempre los aumentos de sueldo a les empleades.