En el barrio de Guernica, en la localidad de Presidente Perón, Provincia de Buenos Aires, un grupo de familias sin vivienda ocupó un predio de tierras para vivir. La toma formaba parte de un reclamo para acceder al derecho de la vivienda digna.
El predio se convirtió en un barrio con aproximadamente 600 familias. El 20 de julio del 2020, el gobierno de la Provincia de Buenos Aires desplegó un operativo policial de más de 4000 efectives. Elles expulsaron a las familias e incendiaron las casillas de madera.
A casi un año de la represión, las familias siguen esperando una respuesta concreta del gobierno provincial a la profunda problemática de la falta de vivienda y trabajo digno.
La situación actual de las familias
En Guernica había comenzado un proyecto de recuperación de tierras para vivir en un predio de 100 hectáreas. Cientas de personas carentes de viviendas se instalaron allí, e iniciaron un reclamo colectivo para que se solucione la crisis habitacional.
Tras la denuncia ante la Justicia por parte de los dueños y la firma Bellaco S.A., el juez de Garantías de La Plata, Martín Rizzo ordenó el desalojo del predio. Al ser expulsadas, muchas de las familias pasaron a estar en situación de calle.
Ariel, parte de una de las familias desalojadas en Guernica, declaró a Nota al Pie: ‘’la situación en la que estamos es crítica, seguimos en las calles. Hay familias que están alquilando, haciendo lo imposible para pagar, otros como yo que dormimos en casas de amigos, y otros también en situación de calle’’.
La deuda del gobierno provincial
Previo al desalojo, el gobierno de Axel Kicillof realizó un relevamiento de las familias y les ofreció como solución entregarles un lote de tierras para solucionar la grave emergencia habitacional en la que se encontraban.
‘’El gobierno nos hizo firmar un acta acuerdo, una preadjudicación de lotes más servicios pero ya cumplió su plazo. Ya pasaron 8 meses y decían que nos iban a entregar los lotes en 6 meses’’, declaró Ariel.
Silvia Saravia, referenta nacional de Barrios de Pie, contó que ‘’han habido montones de reuniones en donde se ha avanzado y retrasado en muchos aspectos. Hay mucha incertidumbre. Ante esto, se está evaluando las acciones de protesta y de lucha por los lotes’’.
‘’El gobierno dice que ya tiene el macizo donde se comenzaron las mejoras para que los lotes tengan servicios. Se exige que lo antes posible se entreguen, se les facilite la posibilidad de una vivienda precaria transitoria y el acceso a distintos programas de autogestión para las construcciones necesarias’’, finalizó Saravia.
La lucha continúa
Ana, delegada de una de las facciones que conforman la recuperación de tierras, contó a Nota al Pie que ‘’hace 3 meses venimos teniendo mesa de trabajo en ministerio, con las mismas promesas y distinta propuesta, pero de cumplimiento poco y nada. Dentro de lo que fue el predio nosotros presentamos 2 propuestas importantes. 1) Que se haga cumplir la ley 14.449; 2) Presentamos un proyecto de urbanización para nuestro barrio. Las posibilidades de concretarlas eran factibles. Pero miraron a un costado, dejando de lado a los que menos tienen, a la clase trabajadora, a la real intemperie’’.
‘’Nos desalojaron y nos dejaron en la nada, pensando que se librarían con total impunidad. Pero no sabían que nosotros éramos un todo, que nos organizamos por seguir la lucha, por hacer valer un derecho genuino. Nosotros no tomamos tierra, las recuperamos. Nosotros no lucramos, ni nos apropiamos de una propiedad que era de alguien de nuestra misma clase, no robamos ni pedimos que se nos regale nada’’, afirmó.
Para finalizar, Ana exclamó: ‘’queremos nuestros lotes en el plazo de «ya», con los servicios básicos correspondientes como lo estipula una de las cláusulas. Lotes en un macizo donde juntos, como barrio, sigamos proyectando y, con nuestro tiempo y trabajo podamos autogestionar nuestras viviendas’’.