El 21 de noviembre se realizarán en Chile las elecciones presidenciales. El favorito para ocupar el puesto es el socialista Gabriel Boric, quien lidera las encuestas desde que empezaron a medirse a todos los candidatos. En los estudios electorales figuraba en segundo lugar Sebastián Sichel, quien fue ministro del actual presidente Sebastián Piñera.
Hasta hace cuatro semanas atrás, todas las encuestas indicaban que el próximo presidente del país trasandino surgiría del ballotage entre esos candidatos. Sin embargo, hace tres semanas les encuestadores cambiaron el pronóstico electoral. Ya no sería Sichel quien disputaría el ballotage sino José Antonio Kast.
Este candidato de derecha incrementó paulatinamente su intención de votos hasta igualar y superar a Sichel. Inclusive, los últimos estudios lo señalan acortando la brecha que lo separa de Boric a solo tres puntos. Resta más de un mes para el día del sufragio. Si la tendencia continúa, el candidato de derecha podría superar al izquierdista Boric y convertirse en el candidato más votado.
Sus ideas de derecha
José Antonio Kast nació en el año 1966 en Santiago de Chile. Se recibió de abogado en 1990. Su carrera política comenzó en 1996, cuando asumió como concejal en el área sur de la Región Metropolitana de Santiago. En 2002 asumió como diputado y repetiría ese cargo en tres elecciones más. En total, se desempeñó 18 años como miembro de la cámara legislativa.
Kast es estrictamente conservador. Se opone al matrimonio igualitario y a iniciativas que revindiquen los derechos de las personas LGBTI. En el año 2017, durante el Día Internacional contra la Homofobia, la casa de gobierno fue iluminada con los colores del arco iris. Kast calificó ese acto como “rendirse ante la dictadura gay”.
También es acérrimo enemigo del aborto, inclusive en casos de violaciones. Se opone al uso de la píldora del día después, argumentando que existen otras formas de anticoncepción. En su lugar propone apoyar desde el Estado a madres que tendrían que llevar embarazos no deseados y mejorar los procedimientos de adopción.
Descree de los movimientos feministas a los que considera poco representativos de las necesidades de la mujer. Considera que el feminismo es un movimiento político representado por una élite que desconoce la realidad de los barrios. En ese sentido, afirma que lo que verdaderamente necesita la mujer chilena es mayor seguridad urbana y acceso a la salud.
Inmigración venezolana
Semanas atrás se vivieron hechos de violencia en el norte de Chile. Fue en la ciudad de Iquique, donde ciudadanes de esa localidad prendieron fuego pertenencias de inmigrantes venezolanes que vivían en situación de calle. El aumento de los hechos delictivos causados por extranjeres provocó en la ciudadanía un sentimiento de rechazo a personas que no sean locales.
Kast, al estilo Trump que proponía frenar la inmigración mexicana con un extenso muro, sugirió de modo similar construir una zanja. Esa iniciativa “inhibiría” la llegada de extranjeres. Sostiene que deben recibirse inmigrantes pero solo a aquellos que cumplan con los requisitos legales de ingreso.
Además, criticó la falta de contención a les inmigrantes. Señaló a la negligencia de las autoridades regionales como uno de los factores desencadenantes de la violencia. En ese sentido, indicó que si desde los municipios se les hubiera otorgado alojamiento, alimentos y atención médica, los conflictos no se hubieran desatado.
Propuestas económicas
El programa económico de Kast es liberal. Considera que el Estado puede recaudar más bajando los impuestos. Para ello aspira a reducir la carga impositiva a las grandes empresas del 27% al 17%, y una mayor reducción impositiva a las Pymes. Aspira a decrementar el IVA en un 2% para incentivar el consumo. Según el equipo económico de Kast, la menor carga impositiva impulsaría el desarrollo económico y con ello se incrementaría la recaudación del Estado.
Cuestión mapuche
Kast afirmó que no planea militarizar la zona del sur de Chile para controlar el conflicto con comunidades mapuches. Considera que debe resolverse el reclamo por la vía del diálogo. Ha expresado su rechazo a un modelo plurinacional, como el boliviano, pero adhiere a un Chile multicultural.