Vuelve en una nueva temporada โHombres y ratonesโ, una certera adaptaciรณn libre delย hรกbil Lisandro Fiks, sobre un clรกsico de John Steinbeck, premio Nobel de Literatura. Escrita en 1934 luego de la depresiรณn econรณmica en Estados Unidos, representa un ejemplo mรกs de la mentalidad masculina hacia la sexualidad femenina.ย
En esta versiรณn nacional, la historia se desarrolla en la Pampa Argentina, y en la รฉpoca proscripciรณn de Perรณn, a fines de los aรฑos โ60.
Las funciones son los domingos en el Teatro Chacarerean, ubicado en Nicaragua 5665, Ciudad de Buenos Aires.
Unidos por el mismo sueรฑo
De argumento sencillo y estructura teatral, cuenta la historia de dos peones amigos de toda la vida. Vienen huyendo por problemas causados por uno de ellos, y van de rancho en rancho. Sobreviviendo a su manera en una hostil geografรญa, buscan trabajo por la provincia de San Luis.
Un dรบo muy dispar, donde uno es inteligente y el otro sobresale por su fuerza y sensibilidad, carente de muchas luces. Los une ademรกs un mismo sueรฑo: comprar un lote y tener su propia granja donde criar conejos.
Son por suerte contratados como obreros temporarios por un suspicaz dueรฑo de estancia. Mientras avanza la trama, hay una atmรณsfera de tragedia, situaciones de deslealtades o uniรณn. Signos de una amistad que va por encima de todo, pero que presagian lo inevitable.
La puesta ofrece total calidad actoral, y ademรกs muy buen diseรฑo escenogrรกfico, ambientando un campo tรญpico argentino. Un trabajo de Micaela Sleigh, que tambiรฉn estรก a cargo del vestuario tradicional. Ademรกs, un buen uso de la iluminaciรณn que en un todo, subrayan las emociones y dan marco a la trama.
Un equipo actoral destacable
La buena versiรณn local cuenta con la direcciรณn del propio Fiks y Gustavo Luppi. Es una obra muy emocional de principio a fin.
El grupo actoral realiza sรณlidas personificaciones, donde Juan Luppi tiene una interpretaciรณn sobresaliente como Jorge, acechado entre la supervivencia y la lealtad. El convincente Ramiro Mendez Roy logra con acierto una total empatรญa y pureza, en su inocente Lito. Gustavo Luppi, muy natural representa la sabidurรญa, como el anciano peรณn, y Lisandro Fiks, es el pendenciero patrรณn del campo. Heinz K. Krattiger como el Polaco, un peรณn radical e intransigente. Y una รบnica mujer, en manos de Sandra Criolani, como la esposa del dueรฑo del campo, quien suma ternura al equipo.
โHombres y ratonesยป describe un relato que asombra e impresiona al auditorio. Expone temas como el desarraigo, un mundo de desamparo yย explotaciรณn, una realidad laboral del interior del paรญs. Un total relato triste de sueรฑos rotos.ย
Resulta, hace varias temporadas, un รฉxito en el ambiente del teatro off, mรกs giras veraniegas. Una obra totalmente recomendable, entretenida, perfectamente ambientada e interpretada.