Nayib Bukele, el presidente salvadoreño, cuenta con el apoyo de la mayoría de la población. A sus 40 años, con su imagen fresca y juvenil, caracterizada por una gorra para atrás, su gran participación en las redes sociales y medidas como la aprobación del bitcoin como moneda nacional, ha logrado ganarse el corazón de les jóvenes.
Pero su imagen es controversial, ¿quién es realmente este presidente millenial?
Nayib Bukele, quien ganó en primera vuelta, al inicio de su carrera política fue identificado con la izquierda radical. Llegó a ser alcalde de la mano del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN). Sin embargo, hoy en día la cúpula del FMLN caracteriza a Bukele como un político de «derecha», que pregona una «falsa izquierda» y emplea «el populismo, la utilización de los recursos de la propaganda, de la mercadotecnia, para confundir».
El mismísimo Bukele definió a los presidentes Nicolás Maduro (Venezuela), Daniel Ortega (Nicaragua) y Juan Orlando Hernández (Honduras) como dictadores. Así se ganó la simpatía de Estados Unidos, un aliado que mantuvo hasta hace muy poco tiempo.
Populismo o demagogia
Durante la pandemia, el mandatario repartió alimentos y ayudas económicas entre el pueblo. También construyó un hospital moderno y llevó adelante un acelerado plan de vacunación. De esta manera cosechó la simpatía de una gran porción de la población, en un país donde el pago de la deuda externa constituye un 90% del PBI.
Paralelamente, Bukele, quien se autodefine como antisemita, cuenta con acusaciones de violación a derechos humanos. Ha sido denunciado por organismos como Amnistía Internacional, ya que es responsable de un largo prontuario en represiones.
La prensa local, con el apoyo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, también ha denunciado una serie de agresiones a periodistas. Asimismo, les trabajadores de la prensa han advertido la vigencia de una “ley de mordaza” que coarta la libertad de expresión.
En tal sentido, otra acusación que le cabe es la de autoritarismo. El control legislativo, que obtuvo luego de irrumpir en el Congreso con el apoyo del ejército, hoy le garantiza la incidencia en los nombramientos y por ende, vía libre a la hora de aprobar leyes.
De esta manera, a pesar de la negativa del pueblo, el presidente ha logrado convertir a El Salvador en el primer país que usa el bitcoin como moneda legal. Y fue con las mismas artimañas que consiguió la habilitación de las reelecciones en la Corte Suprema. De forma que Bukele tiene luz verde para aspirar a un segundo mandato.
Por otro lado, logró conquistar a les jóvenes con frases como “el dinero alcanza cuando nadie roba”. En el seno de un país caracterizado por su violencia interna propiciada por las pandillas, su discurso en contra de la corrupción y de la delincuencia, ha sido bien recibido. Son les jóvenes quienes se ven más afectades por la falta de trabajo y la acción criminal, ya que muchas veces se ven obligades a ingresar a pandillas. Sin embargo, en el último tiempo han salido a la luz una serie de denuncias que vinculan al presidente con las cabezas de algunas pandillas.
El acercamiento a la izquierda
La familia de Bukele siempre simpatizó con los principios de justicia social que enarbolaba la guerrilla izquierdista del FMLN. Así fue que en los años ochenta incluso brindaron refugio a algunes de sus dirigentes, lo que implicaba una amenaza de encarcelamiento o muerte.
De esta manera, en 2011 Bukele se ofreció al FMLN para competir por la alcaldía de Nuevo Cuscatlán, así ingresó a la política ganando en la elección de marzo de 2012. Luego, logró recuperar la posición en el período 2015-2018.
Sin embargo, el partido lo expulsó el 10 de octubre de 2017. El Tribunal de Ética tomó la decisión a raíz de una agresión verbal a la concejala Xochilt Marchelli. Es a partir de este hecho que hoy enfrenta un proceso judicial por violencia machista.
El mandatario terminó optando por dejar de lado sus convicciones políticas y participó de las elecciones presidenciales nucleado en la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), que lo llevaron a la victoria en el 2019.