Este jueves, el Consejo Federal de Educación aprobó una vuelta a la “presencialidad plena” en las escuelas. Ocurrirá a partir del 1 de septiembre. Para ello se dispusieron las siguientes medidas sanitarias: distancia de 0,90 metros en las aulas, la utilización obligatoria de barbijos y ventilación cruzada, entre otras.
Así lo anunció el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, en una conferencia. Por otro lado, señaló que aquellos establecimientos que no puedan garantizar un distanciamiento de 0,90 metros, tendrán la posibilidad de reducirlo a 0,50 metros. Sin embargo, en los casos de aulas poco espaciosas, deberán aplicarse medidas preventivas extra. Algunas de ellas son: el testeo de estudiantes, el uso de medidores de dióxido de carbono y de barbijo doble o triple, informó Télam.
Un contexto favorecedor
El funcionario explicó que esta decisión se inserta en un contexto de mejora de los indicadores sanitarios y del avance del proceso de vacunación en el país. De manera que se puede pensar en un retorno seguro a la presencialidad. Por otra parte declaró que «cada una de las jurisdicciones va a poder determinar la progresividad» de las medidas aprobadas por el Consejo Federal de Educación.
Por último, hizo hincapié en el compromiso del Gobierno Nacional de acompañar a las distintas provincias en el proceso de adquisición de los insumos necesarios para una vuelta a la presencialidad segura. Entre ellos mencionó la necesidad de abastecerse con medidores de carbono para corroborar que haya circulación cruzada en el aula, kit de testeos y barbijos.