La agrupación Plataforma Socioambiental nucleó a organizaciones sociales y ambientales para realizar protestas en resistencia a la siembra del trigo genéticamente modificado HB4; creado en Santa Fe a partir de una investigación público-privada. El ‘’Panazo’’ tiene el objetivo de mostrar a los consumidores de qué forma se producen los alimentos.
‘’El ecosistema global no soporta que se sigan expandiendo los monocultivos fumigados y fertilizados químicamente. La vida planetaria es un complejo de equilibrios que están rotos. El suelo es uno. Qué sembrar define cómo nos paramos frente a la crisis climática global’’, afirmaron los representantes de Plataforma Ambiental.
En la Ciudad de Buenos Aires, la convocatoria se desarrolló en Plaza de Mayo a partir de las 12 horas, con la participación de campesines que repartieron gratuitamente trigos, panes y torta fritas agroecológicas. También se confirmaron actividades esta semana en Baradero, Tandil, Rosario y Santa Fe.
¿Qué es el trigo transgénico HB4?
Nota al Pie consultó a Karina Alice, periodista especializada en ambiente.
’’El trigo transgénico es una semilla que está modificada genéticamente, no es natural sino que es de laboratorio y se presenta como resistente a las sequías. Con las sequías que estamos viviendo a raíz del cambio climático uno puede pensar que se adapta a las condiciones actuales’’, explicó la especialista
‘’Sin embargo, este trigo desarrollado por la empresa Bioceres también es resistente al glufosinato de amonio, un veneno con el cual se fumigan los sembrados de este trigo’’, afirmó Alice. Este tipo de herbicida fue prohibido para su utilización agrícola en los países de la Unión Europea, ya que es 15 veces más tóxico que el glifosato.
En octubre de 2020 fue aprobado para su utilización por el gobierno argentino y espera ser comercializado. ‘’El gobierno aprobó esta siembra, sin ningún tipo de diálogo o debate. Es por esto que más de 1000 científicos del CONICET y 30 universidades públicas nacionales expresaron su rechazo a través de una carta abierta’’, declaró la periodista.
Por una alimentación agroecológica y desarrollo sustentable
‘’Ha sido demostrado que el agronegocio lleva a la devastación del suelo, al desmonte, a la contaminación de otros cultivos. Esto es dañino para la salud ya que quedan residuos de los agrotóxicos en la cosecha; y llega a la mesa de los argentinos a través del pan, las pastas y los derivados de la harina de trigo’’ declaró Alice.
Es por esta razón que las organizaciones plantean que el camino para salir de la crisis económica debe ser garantizando los derechos ambientales; proponiendo modelos de desarrollo que no contribuyan a la destrucción de los ecosistemas.