Las autoridades del Servicio de Agua y Mantenimiento Empresa del Estado Provincial (SAMEEP) establecieron las pruebas de tuberías correspondientes a la red encargada de conducir el agua. La misma abarca desde el segundo acueducto hasta las ciudades con mayor número de habitantes en el centro de la provincia.
“Se trata de 110 kilómetros de cañerías del segundo acueducto en los que se realiza la prueba hidráulica y limpieza sanitaria, tramo que va a alimentar a Charata, General Pinedo y localidades de la zona en un principio”, estableció el presidente de la empresa estatal, Leonardo Aguzín.
La falta de agua potable en el interior del Chaco es un mal recurrente, en infinidad de ocasiones los problemas de esta índole golpeaban a las ciudades claves como Charata, Las Breñas, Villa Ángela, entre otras. Por lo que estas dificultades están cercanas a quedarse en el olvido.
Las pruebas realizadas consistían en el traslado correcto, libre de filtraciones inesperadas, haciendo pasar agua no apta para el consumo, logrando a la par que se limpie el entramado de caños. Las mismas resultaron óptimas y con ello, la empresa prevé que en septiembre u octubre podría estar llegando el agua a las puertas de les vecines.
Según lo planeado, el primer destino para el agua será Charata. A partir de allí, se redistribuirá a los demás pueblos y ciudades. “Será una de las primeras localidades beneficiadas, teniendo en cuenta que ya tiene sus redes de agua potable”.
Asimismo, el funcionario afirmó que todos los esfuerzos tienen como objetivo “llegar a fines de septiembre y principios de octubre de la mejor manera”. Lo toman como “la primera meta a alcanzar”, para luego continuar con el abastecimiento a las demás localidades.
El evento a la vez contó con la asistencia de distintes mandataries de la empresa encargada del agua como su vocal Raúl Acosta y el Jefe de Zona III, Julio Benítez. Agregades a estes, distintes concejales y funcionaries municipales. A la vez, el equipo de bomberes de la ciudad se encargó de supervisar las pruebas.
Algunos inconvenientes
Las pruebas se realizaron con la presencia y el asombro de les vecines que se acercaban al lugar para observar este hecho histórico. Pero como toda prueba tiene aspectos a mejorar, el equipo de trabajo tuvo un percance que se pudo solucionar de manera casi inmediata.
“El llenado de las cañerías puede ocasionar desbordes o pérdidas, como ocurrió en Napenay, pero es parte de las pruebas que se realizan”. Allí la pérdida se detectó en una prueba hidráulica y las válvulas correspondientes se obturaron de inmediato, según indicaron desde la institución.