En el marco de la segunda edición virtual de la Feria del libro Infantil y Juvenil, que se realiza del 26 al 30 de Julio, se llevó a cabo un conversatorio a través del Instagram oficial de la editorial Madreselva. El mismo tuvo como eje la incorporación de las diversidades corporales en la Educación Sexual Integral (ESI).
En el evento virtual se abordaron las temáticas ¿Qué es la ESI? ¿A qué llamamos diversidad corporal? ¿Cómo lo pensamos en relación a las infancias y adolescencias?. Además, prácticas gordofóbicas y ¿Cómo podemos delinear algunas estrategias para que la diversidad corporal forme parte de la educación sexual integral y no pierda por ello la fuerza de las contradicciones que demandan y pujan desde los movimientos sociales?
Nota al Pie dialogó con la integrante del colectivo editorial Madreselva, Verónica Diz. La entrevistada remarcó la importancia de hablar de diversidad corporal y explicó que el término refiere no solo del volumen sino “de todas las posibilidades de esa diversidad. Es decir, colores, formatos, capacidades y, también, volúmenes”.
Expuestos constantemente
Asimismo, afirmó que vivimos atravesades permanentemente por una propaganda impuesta por el sistema hetero-patriarcal, capitalista y colonial. “Nos impone unos cuerpos, los que este sistema complejo e imbricado nos muestra como el cuerpo que vale. Me refiero al cuerpo blanco, flaco y rubio al cual se le adjudican todas las capacidades. Mientras que los otros cuerpos sirven para ser explotados, para trabajar, fuera de la hegemonía”.
Acusa a los medios de comunicación y hasta a los cuentos de criar ciudadanes con ese ideario. Y aseveró que lo importante es romperlo y nos alienta a no conformarnos. “Por ejemplo, si una marca de jabón utiliza cuerpos no hegemónicos en la imagen y propaganda de su producto, lo hace por una presión de los activismos que muestran y militan esta desigualdad”, aclaró.
Y continuó explicando que “cuando la crítica se convierte en sentido común las marcas lo capturan para hacer un negocio. Por eso es importante no conformarnos con que una, dos o tres marcas lo usen para hacer propaganda. Sino que eso esté incorporado en la sociedad como un cambio que se hace de abajo hacia arriba”.
Un modelo médico hegemónico
Respecto a una expresión de este ideario hegemónico en las niñeces y adolescencias, la integrante de la editorial Madreselva mencionó los mandatos médicos de delgadez que se han instalado como únicos y legítimos.
Sostuvo que hay una niñez que sufre mucho esta imposición, que se imponga que adelgace une niñe tiene una impronta en lo emocional muy grande. Debido a que los mismo son obligades, “no es opcional hacer dieta y muchas veces cuesta mucho, con muchas restricciones y sacrificio”.
Entiende que el cuerpo gorde es un cuerpo que está pensado en la sociedad como un “cuerpo enfermo” y por ende hay que corregirlo llevándolo hacia una delgadez que pretende ser universal.
Diz considera que no importan las causas; ni que muchas veces implique un maltrato y culpabilización hacia la figura materna quien no lo alimenta bien. No se considera que “nos llenan de propaganda y en la industria del alimento se nos impone las opciones no saludables como las más baratas o posibles”, denunció.
La ESI como herramienta
La ESI en la Ciudad de Buenos Aires tiene alrededor de 15 años ya que la Ley Nº 2.110/06 de Educación Sexual Integral fue sancionada en octubre de 2006 y fue impulsada por los feminismos desde los Encuentros Nacionales de Mujeres.
Este medio también dialogó con la docente especialista en ESI y activista gorda, Iris Luz Ortellao. Explicó que “la ESI es un derecho y un marco legal que nos da el piso que nos permite exigir que, en todas las instituciones educativas de gestión pública y privada del territorio, se garanticen determinados contenidos y prácticas afines a todo el abanico legal del marco de derecho en relación a derechos sexuales reproductivos y no reproductivos”.
Derechos y Diálogo
Ortellao entiende que el marco de derechos se va ampliando permanentemente y se va ganando en la calle. “Hay un diálogo constante entre esta herramienta pedagógica y política y su actualización a partir del diálogo con los movimientos sociales”. Destacó además que “desde 2006, los distintos movimientos sociales fueron ganando o perdiendo pulseadas”.
Entiende que si bien la ESI habilita la conversación sobre distintas temáticas, hay otras que aún están pujando para encontrar un espacio en este diseño curricular y en esta serie de prácticas que están ponderadas como posiblemente escolarizadas.
La docente especialista en ESI afirmó “Hay debates, pero aún hay mucho que dar respecto a las tensiones de poder que deben visibilizarse al momento de pensar cuál es el amplio sentido de la palabra diversidad”.
Y aseveró: “Lo cierto es que sin la ESI difícilmente podríamos instalar el tema en las escuelas. Lo que pasa es que es preciso hacerlo desde la contradicción desde poder cuestionarse los supuestos en relación a por ejemplo la salud y lo saludable, lo intersex, los cuerpos trans”.
Por ello invitó a reflexionar “¿En qué medida los contenidos y prácticas, que están previstos desde un discurso institucional como factibles para las escuelas, responden a las demandas y las voces de las personas que integran estos colectivos políticos y movimientos sociales?”.
Diz afirmó que “Siempre fue una preocupación de los feminismos entender los cuerpos como cuerpos sexuados. Y que no pueden quedar las niñeces y las adolescencias presas de la información que les pueden dar solo sus familias”.
Y prosiguió “Más teniendo en cuenta que los niveles de abuso sexual en las infancias se producen, en gran medida, de manera intrafamiliar. Habría que romper ese aislamiento y que elles tengan herramientas para crecer en libertad con una buena relación con su cuerpo.”
Editorial Madreselva
En un ámbito donde la televisión, las revistas, propagandas, imágenes de cuentos, entre otros reproducen los valores hegemónicos; la editorial se sensibiliza con estos temas de pensar todos los cuerpos. Diz afirmó “Como feministas creemos y sostenemos, desde hace muchos años, que son temas que nos importan y nos importaron siempre.”
La editorial intenta integrar los mensajes relacionados a la ESI de forma natural. La integrante del colectivo mencionó que “hay veces que realizamos libros más explícitos como Mamá Me Vino donde hace referencia a la primera menstruación”.
“Pero tenemos otros libros como Boris y penumbras donde junto a la ilustradora logramos introducir mensajes cifrados por ejemplo la familia del protagonista no es la hegemónica, conformada por una madre y un padre, o también aparece una niña que juega con autos y que es gordita”, detalló la entrevistada.
Y concluyó: “Libros titulados como Menganita, Tienen 2 mamás o Mamá soy gorda, donde el contenido es explícito, expulsa a otro público. Nosotros damos estos mensajes y los incorporamos de otra forma porque nos parece importante reflejar la diversidad desde lo cotidiano”.