La comunidad Campo Maripe se encuentra ubicada en Fortín Vanguardia, a 15 km de la localidad de Añelo, en la provincia de Neuquén. El yacimiento petrolífero Vaca Muerta está principalmente en la cuenca neuquina; pero la explotación de gas y petróleo se desarrolla sobre todo en Añelo.
El fracking o fractura hidráulica, supone la extracción de hidrocarburos no convencionales; atrapados estos en el ´esquisto´ a mayor profundidad que los hidrocarburos convencionales. Para la explotación de los mismos, se procede mediante la perforación; utilizando cantidades desorbitantes de agua, arenas de sílices y químicos.
La comunidad Campo Maripe transita estas tierras desde el año 1927. A principios de la década del ’30, Charles Edwin Weaber, geólogo estadounidense, denominó Formación Vaca Muerta a la zona. En ese entonces, el profesional realizaba trabajo de campo para próximas inversiones de Standard Oil of California, actualmente Chevron.
El lobby extractivista interrumpió de forma temprana el vínculo armónico de la comunidad mapuche con la naturaleza. También desoyó una cosmovisión ancestral poblada de saberes que incomodan a este modelo; elogiado por el gobierno provincial y nacional; incapaces, hasta entonces, de acceder a otros proyectos amables con la tierra y la vida.
Lucha ancestral
La werken (vocera) de la comunidad mapuche, Lorena Campo Maripe, conversó con Nota al Pie; y dio detalles de la lucha incansable que antiguamente viene haciendo su familia en defensa del territorio. Cabe aclarar que la comunidad lleva el apellido Campo Maripe en honor a Belisario Campo, el abuelo de Lorena; quien resistió férreamente el avance de expropiadores y empresas extractivistas.
Un hombre de apellido Vela llegó en 1975 para arrebatarle sus tierras. El expropiador, en 1978, obtuvo “en plena dictadura militar; de manera irregular, porque la verdad nunca hicimos un seguimiento; el título de propiedad de la tierra para hacer su proyecto forestal, iniciado ya en el año 1975”, aclaró Campo Maripe.
Su abuelo decidió ser peón en su propia tierra “con tal de no despojarse del lugar donde él vivía”, sostuvo la werken. El “propietario” quemó el hogar de la familia. También golpeaba a Belisario y explotaba laboralmente a sus dos hijes. Aun así, Campo se mantuvo en una disputa permanente con Vela; luchando por un espacio que les fue arrebatado injustamente.
Acuerdo entre Chevron e YPF
En el año 2011, la empresa petrolera Repsol YPF anunció el descubrimiento de hidrocarburos no convencionales en la formación Vaca Muerta. Les hijes de Vela firmaron un acuerdo con Chevron e YPF. Ese acuerdo permitía a estas empresas explotar petróleo en esta zona; concretamente en Loma Campana, donde se encuentran instaladas partes de las tierras del Lof Campo Maripe.
En el año 2013 se anunció oficialmente, sin previo aviso a las comunidades, “la explotación del yacimiento”. Una vez enteradas de este proyecto, iniciaron la lucha. En el año 2014 ocuparon los pozos de YPF. El caso se visibilizó masivamente, por ende, el gobierno provincial les otorgó la personería jurídica.
Antes de obtenerla, la provincia no les reconocía como comunidad. De todas formas, con respecto a la personería, Campo Maripe aclaró: “No legitima nuestra identidad; es solamente un registro, con el cual podés plantarte frente a las empresas y el gobierno, pero no tiene nada que ver con reconocerte o no”.
En 2019 se realizó un juicio contra la comunidad Campo Maripe. La causa fue impulsada por la familia Vela, la cual denunció a la comunidad de usurpar las tierras donde se asentaron hace décadas. De todas maneras, se logró la absolución de les seis imputades.
Relevamiento territorial
En el año 2015 la comunidad le solicitó a la provincia que hiciera un estudio de relevamiento, en el marco de la Ley Nacional de Emergencia Territorial 26.160. Ese estudio probó mediante un informe histórico-antropológico que la familia Campo Maripe habita esas tierras desde 1927.
Los resultados del estudio también dejaron a las claras que “el territorio le corresponde a la comunidad en los límites que delimitamos. Al momento de entregar el dictamen jurídico del estudio la provincia lo negó totalmente”.
Este estudio, según Campo Maripe, se hizo por un equipo técnico contratado por la misma provincia. En él había “antropólogos, sociólogos, historiadores, abogados y georreferenciadores. A su vez, a cada punto que se relevó iba el equipo técnico con dos integrantes de la comunidad designados en asamblea”, explicó Campo Maripe; y subrayó que “el trabajo fue minucioso y bien hecho”.
La comunidad actualmente realizó acciones legales contra la provincia y el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI). Esto, debido al cese de los relevamientos en las comunidades ubicadas alrededor de Vaca Muerta; los cuales corresponde finalizar. “El relevamiento nos brinda una seguridad territorial”, destacó la werken de la comunidad.
Consecuencias del Fracking en la comunidad
El primer impacto, para Campo Maripe, es social y económico. En el pueblo “cuando vas a abastecerte de alimentos; el precio es a valor petróleo”. Asimismo, “la actividad del fracking genera temblores que han provocado, incluso, partimientos de viviendas”, relató.
La circulación de vehículos, por otro lado, produce que “el pasto se seque porque vuela mucha tierra”. A su vez, los gases existentes en el ambiente “por los mecheros, hacen que no llueva”, puntualizó la vocera.
“Mis padres murieron los dos de cáncer, jóvenes los dos, y de mi familia tengo primos que están en etapa de recuperación de cáncer también. Esto afecta un montón, si no tenés salud no tenés nada”, enfatizó.
El “progreso” del lobby extractivista y la complicidad de los gobiernos
El discurso oficial “dice que vuelcan parte de las regalías en obras, en servicios, pero en realidad tenés falta de hospitales, falta de colegios; y los servicios no son los adecuados”. También hay escasez de agua en el pueblo, mientras que “para el fracking se destinan millones de litros de agua”.
“Las empresas se llevan todas las riquezas y dejan a los pueblos empobrecidos”, remarcó Campo Maripe. La actividad petrolera la ejercen, en su mayoría, “multinacionales que en su tierra tienen prohibido hacer fracking”. “Como en nuestro país no hay regulación, obviamente invierten acá”.
La explotación petrolera afecta “la salud misma de la sociedad en general. Cuando uno se para frente a una petrolera no es porque quiera que la gente pierda el trabajo, sino que defendemos la vida por sobre todas las cosas”, reflexionó Campo Maripe, quien lleva consigo el legado de lucha de su abuelo.