El 14 de marzo, Día Internacional de lucha Contra las Represas, las mujeres indígenas emprendieron su caminata. Este sábado 22 de mayo, Día de Acción Global de lucha Contra el Terricidio, llegaron a la Ciudad de Buenos Aires. Caminaron aproximadamente 2000 km hasta llegar a la Capital Federal.
Las mujeres mapuches del sur salieron desde el Lof Mapuche Pillán Mahuiza ubicado en la Puelwillimapo Corcovado, Chubut. Luego el bloque norte partió desde Saénz Peña, en Chaco. Se sumaron también mujeres indígenas del bloque centro y noroeste.
Hoy, hermanadas, llegaron a capital cubiertas por su identidad, firmes en su andar, para decir: Basta de Terricidio. Otra de las consignas es: Basta de chineo, referido este término a las violaciones sistemáticas sufridas por mujeres y niñas de las comunidades.
Asimismo se pueden escuchar otras formas de violencia que habitan los cuerpos de las mujeres y la Pachamama. Sus pasos retumbaron en la ciudad del asfalto y sus voces evocaron a los ancestros y sus luchas y dolencias aún presentes.
Canta quien está despierta
En uno de los videos transmitidos por el canal de Instagram del Movimiento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir durante la caminata en Buenos Aires se puede escuchar: “Mujeres indígenas, mujeres resistiendo, la lucha por la tierra ya está floreciendo”; uno de los tantos cantos rebeldes y cargados de lucha de este puñado de fueguitos inmenso.
También en el video se oyen otras consignas transmitidas en el epicentro de la ciudad donde se produjo la Revolución de Mayo; correspondientes también a aquella época y que hoy siguen vigentes: “La tierra robada, será recuperada, amada, cuidada y nunca negociada”.
“Alerta, alerta, alerta que caminan mujeres resistiendo por la tierra y por la vida, se cuidan, se cuidan, se cuidan terricidas, ¡marichiweu!”, se escucha cantar en el video a las mujeres que enarbolan la ciudad de lucha ancestral.
Un modo de vida diferente en la tierra
En otro de los videos se pudo escuchar a Moira Millán, weychafe mapuche y defensora de los derechos humanos; transmitir un mensaje a les compañeres: “hemos traído nuestra medicina, la medicina de los cerros, la medicina de la cordillera, la medicina del mar, la medicina de la meseta”.
Siguiendo la idea manifestó que: “venimos a sanar a un pueblo que no entiende que la única vacuna que nos puede volver a la vida es reestablecer el vínculo con la tierra que este sistema ha quebrantado”.
“Hermanas, lo estamos logrando, ya es un hecho, nosotras nos dispusimos en manos de nuestros ancestros, nuestras ancestras y no hubo quien nos parara”, expresó la weychafe mapuche.
“Estamos aquí a punto de ser las dadoras de este nuevo tiempo, las paridoras de un nuevo mundo”, afirmó Millán.
En el recorrido, se puede escuchar y ver a las caminantes mediante otro video reproducido por su instagram preguntarse también: ¿Dónde está Tehuel? En ese sentido también se pidió justicia por Rafael Nahuel, Macarena Valdés y dijeron “basta de violar en manada a nuestras niñas en los territorios del norte”.
Las flores de pie contra el terricidio
El terricidio, según las Mujeres Indígenas por el Buen Vivir, significa las múltiples formas del sistema de asesinar a la tierra y a la vida. Estas formas diversas son: genocidio, ecocidio, epistemicidio, feminicidio, transfeminicidio y travesticidio.
Para las mujeres indígenas, los terricidas son “las corporaciones extractivistas, empresas y los Estados Nacionales del mundo”.
Ellas, las flores, caminan sanando y cultivando conciencia en cada pueblo transitado en su largo andar. Ese “nuevo mundo”, como dice Millán, “viene a sanar a un pueblo”.
Las mujeres indígenas llegaron a Buenos Aires para declarar al terricidio como crimen de lesa naturaleza y lesa humanidad y que los culpables sean juzgados y condenados. Ellas dicen basta a toda forma de violencia a la tierra y a la vida, vienen a sanar con sus medicinas y visibilizan las múltiples injusticias sociales.
Redes del Movimiento:
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