El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires anunció ayer, en conferencia de prensa desde su sede de Parque Patricios, la postura de acompañar el plan de restricciones sanitarias del Gobierno Nacional.
Asimismo, determinó la suspensión de las clases presenciales, como también las virtuales, para los próximos días miércoles, jueves y viernes. El Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, declaró que una vez que se vuelva al estadio anterior (a partir del 31 de mayo), se volverán a abrir las aulas porteñas.
Sin embargo, agregó que la situación sanitaria es preocupante y que demanda la responsabilidad de todos los distritos para realizar una tarea coordinada en el contexto de la suba de contagios. Confirmaron su compromiso de sumarse a las limitaciones impuestas para actividades no esenciales, tal cual dispuso el Gobierno Nacional.
Conflicto entre CABA y Nación
Esta decisión de Ciudad en torno a la escolaridad abre otra polémica con Nación. El Ministro de Educación Nacional, Nicolás Trotta, precisó que el Presidente Alberto Fernández no suspendió las clases (en general) sino la modalidad presencial, según indicó ante El Destape Radio.
Por este motivo, declaró a la Agencia TÉLAM que califica incomprensible la decisión de suspender las clases virtuales, por parte del Gobierno Porteño.
“Tenemos que ser claros en este proceso de alternancia y sería saludable que la Ciudad… …que tiene mejor acceso a la conectividad tenga capacidad de dar una mejor respuesta a los estudiantes”, remarcó Trotta.
En cuanto a las actividades de los gremios educativos porteños, la Unión de Trabajadores de Prensa (UTE), tenían previsto para hoy tareas de radio abierta y semaforazos en distintos puntos de la Ciudad. La Asociación de Enseñanza Media y Superior (ADEMYS) decidió mantenerse en plan de alerta y en lucha por la educación.
Cabe recordar que ambos sindicatos siempre se manifestaron en contra de las clases presenciales y a favor de la virtualidad. Este antagonismo con la política educativa del Gobierno Porteño se ve profundizado a causa de las nuevas decisiones de suspender la virtualidad.