El Instituto de Estudios sobre Estado y Participación (IDEP) Salud de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), presentó los resultados del primer informe del Observatorio de Medicamentos como Bien Social. Éste fue realizado junto con el Instituto de Estudios y Formación (IEF) de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) Autónoma
La investigación se llevó a cabo en el período que va del 1° de marzo de 2020 al 1° de marzo de 2021. Entre los resultados más significativos se destacan que, de los 10 medicamentos más vendidos, el aumento de precios en ese período fue del 60%. Por su parte, los medicamentos para enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión e hipotiroidismo alcanzaron un 130% de aumento. Esto representa un impacto negativo considerable al gasto de bolsillo de los trabajadores.
En diálogo con Nota al Pie, la farmacéutica y miembro del área de medicamentos de IDEPSalud ATE, Patricia Rivadulla, contó cómo se realizó el estudio del Observatorio.
Por qué un observatorio de Medicamentos como Bien Social
Según la encuesta permanente de hogares el gasto en salud de las familias tipo (un matrimonio con dos hijes) era del 6,3% y de ese porcentaje el 29% se destinaba a medicamentos. De esas cifras se desprende que el aumento en los precios de éstos afecta al sueldo de les trabajadores promedio de la provincia de Buenos Aires.
“Desde IDEP consideramos que los medicamentos responden a una demanda inelástica; cuando la gente lo necesita no puede optar por no comprarlo, no hay posibilidad de elección”, explicó Rivadulla. Es por eso que decidieron ver cómo incidía el precio de los medicamentos en la economía familiar de les trabajadores y en la economía general.
El estudio tomó 3 ejes: medicamentos, salario e inflación, para ver cómo impactaba cada uno en las economías familiares. Se decidió como recorte tomar todo el devenir de la pandemia para medir el comportamiento de la cadena de valor.
Para la muestra, se tomaron los 10 medicamentos más vendidos. Además, se armó un modelo con las patologías prevalentes y crónicas más comunes; para ver cuánto invertía una familia que tenía pacientes crónicos en medicamentos de marzo 2020 a marzo 2021.
Resultados del estudio
De los 10 productos más vendidos, pudo observarse que el incremento en precio era del 60%, muy por encima de la inflación interanual. En el caso de los medicamentos crónicos, la suba ascendía al 130%, lo cual representaba un duro impacto sobre las economías familiares.
Por otra parte, se realizó un seguimiento de la obra social IOMA, una de las más representativas para les trabajadores bonaerenses. Allí se observó que al ampliarse la cobertura de los medicamentos de la muestra, mejoró la situación de las economías familiares. En este sentido, el impacto sobre el bolsillo de les trabajadores fue mucho menor.
Respecto a cómo se forman los precios de los medicamentos más vendidos, Rivadulla explicó: “a partir de este estudio vimos que había muchos temas más para abordar; desde el oportunismo del mercado farmacéutico en el aumento de precios de activos demandados durante la pandemia, hasta ver como el mismo mercado va respondiendo a distintas situaciones y cómo esto impacta en las diversas economías familiares”.
La salud como derecho: la importancia de políticas públicas
En los hogares con menores recursos el gasto en salud se torna crítico porque define el acceso de las personas a un derecho básico como es la salud. En este sentido, genera un escalonamiento según el poder adquisitivo individual o familiar de acuerdo al dinero que se tenga y en qué momento.
De allí la importancia del relevamiento de estos datos como una herramienta fundamental para la elaboración de políticas públicas que regulen el precio, el uso racional y la producción estatal de medicamentos esenciales y que garanticen el acceso a la salud para todes.
El informe completo se puede descargar aquí.
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